El dirigente municipal Fernando Baña (lista 17), que hasta hace algunos meses se desempeñaba como responsable de prensa y propaganda de ADEOM, hace tiempo que vota anulado en las elecciones y sólo se cambió al sufragio en blanco en octubre del año pasado, para poder colocar el Sí rosado. A pesar de su desencanto con el FA, Baña reconoce que la posibilidad de que Olivera sea intendenta genera “expectativas” entre los trabajadores, aunque eso no implique, en su caso, un respaldo en las urnas. “Es evidente que es una definición que nos interesa y que seguimos de cerca, y no creemos que Ana sea lo mismo que Daniel Martínez o Carlos Varela. Tenemos expectativa de que con ella haya un relacionamiento mejor que el que hemos tenido durante estos 20 años de gobierno del FA”, señaló.

Panorama

Siete de los 15 cargos del Ejecutivo de ADEOM están en manos de corrientes frenteamplistas, y los ocho restantes son controlados por listas que generalmente se conocen como “radicales”, y que han sido más críticas con los gobiernos del FA. En el bloque minoritario, la lista 5 tiene cuatro representantes y tres son de la 112, mientras que entre las tendencias no frenteamplistas el espectro está dividido así: tres son de la 17 de Mabel Lolo; dos de la 1980 de Álvaro Soto (del Partido de los Trabajadores, a quien no pudimos ubicar por estar de licencia); dos de la 307 de Aníbal Varela, y la delegada de la 1974 es Elena Lequio.

El sindicalista admite que en el gremio hay un “recuerdo positivo” del trabajo que llevó adelante Olivera al frente del Departamento de Descentralización, de 1999 a mediados de 2000, y luego en el período 2003-2005 (en ambos casos el intendente era Mariano Arana). “Con ella siempre nos llevamos muy bien, pero también es cierto que no es lo mismo ser directora de Descentralización que intendenta; por eso preferimos hablar de expectativa y no de entusiasmo”, advirtió.

Por su parte, la actual presidenta de ADEOM, Elena Lequio (lista 1974), también tiene un buen recuerdo del trato con Olivera cuando ésta fue directora municipal, y rememoró que en aquel momento se conformó una Coordinadora de Descentralización, en la que los funcionarios pudieron plantear sus discrepancias con el proceso que llevaba adelante la administración. “Nunca tuve problemas con ella y me animo a decir que ADEOM en su conjunto mantuvo siempre un buen diálogo” con la ahora candidata, afirmó.

Pero la situación cambia cuando hay que imaginarse a la referente comunista como intendenta. “Para mí la persona que asume pasa a ser el patrón. Y no me importa si es del Frente Amplio, del Partido Nacional, colorada o independiente. Puede ser Varela, Martínez o, ahora, Olivera, y para mí siempre será lo mismo. Estamos acá para defender nuestros intereses como trabajadores y ellos siempre serán la patronal”, enfatizó Lequio. La sindicalista votará en blanco en las municipales, como hizo en las anteriores elecciones, según comentó, y lo mismo hará su compañero Aníbal Varela, de la lista 307. “No me seduce ningún candidato y hoy me siento un orejano en materia política”, respondió Varela, que dijo no tener “ninguna expectativa” por la eventual llegada de Olivera al sillón municipal, a pesar de haber tenido con ella una “buena relación” cuando integró el gabinete de Arana.

“Esto no pasa por cómo te lleves con la persona, sino que lo importante es que llegado el momento terminás siempre defendiendo intereses que son contrapuestos. Sobre la figura de Olivera no tengo nada para decir, porque en todo caso la figura la elige la fuerza política FA y, sea quien sea, terminará aplicando el programa definido por ellos”, razonó Varela, que piensa que la continuidad del oficialismo en la capital está asegurada.

Compañera Ana

En el gremio municipal hay espacio para los frenteamplistas, aunque la relación de fuerzas no les sea favorable (ver recuadro). Es el caso del dirigente del Ejecutivo, Camilo Clavijo (lista 5), que no disimula su satisfacción con la candidatura de Olivera, quizás mayor a la de otros frentistas. “Lo vemos con muy buenos ojos. Creo que es un importante reconocimiento de la fuerza política a su larga carrera militante a nivel sindical y social, y es importante también el apoyo que logró como candidata de consenso”, manifestó Clavijo, integrante del Partido Comunista del Uruguay (PCU). La lista 5 es una alianza entre comunistas, socialistas, democristianos y frenteamplistas independientes. La actual subsecretaria del Mides, según Clavijo, fue la “principal impulsora de la descentralización y los centros comunales” durante los gobiernos de Arana, un desempeño que siempre ha sido “reconocido” por los funcionarios municipales. “Hay que aprovechar ese conocimiento y respeto mutuo para elevar la mira y el nivel de discusión durante la próxima administración”, propuso el sindicalista comunista. La otra lista de ADEOM en la que militan frenteamplistas es la 112 (donde hay gente de Alianza Progresista, Asamblea Uruguay e independiente), y allí coinciden en una lectura positiva sobre la figura de Olivera.

“Estoy muy contenta, te digo la verdad. Había cosas en Martínez y Varela que no nos cerraban y la aparición de Ana generó muchas esperanzas. En mi caso soy una defensora del género, pero de ella me entusiasman, además, sus características, bien distintas a las de Hyara Rodríguez, por ejemplo”, opinó Elur Montes de Oca, integrante de esa lista, que, como dirigente de ADEOM, llegó a entrevistarse con Tabaré Vázquez antes de su asunción como intendente, en 1990.

La gremialista piensa que Olivera “luchó en la primera fila” del Mides, que tiene llegada entre las bases frenteamplistas y que realizó un buena tarea cuando le tocó estar en la Intendencia de Montevideo, incluyendo la responsabilidad en la “complicada” Inspección General.

“Estoy segura de que los demás compañeros de las otras listas, a las que llaman ‘radicales’, saben que esta mujer viene para defender los intereses de los trabajadores y preservar las fuentes de trabajo. Es cierto que siempre van a ser patrones, pero la habilidad nuestra tiene que estar en sortear los obstáculos y convencerlos de que nadie conoce mejor los temas municipales que los trabajadores. No estamos para poner palos en la rueda, porque queremos que marche bien la IMM para que nos vaya bien a nosotros”, puntualizó Montes de Oca, quien sostuvo que las alcaldías “serán un gran problema” y señaló que espera tener en breve una reunión con Olivera para debatir al respecto.

La 112 es la continuación de la vieja lista 11 que orientaba el comunista Eduardo Platero, y el número 2 se agregó al final para aludir a una “segunda vuelta”. “A nosotros nos dicen moderados, pero no creo que sea más revolucionario patear siempre la mesa. No somos de perder los estribos y no nos vamos a ir nunca de ADEOM. Si nos expulsan por la puerta les entraremos por la ventana”, agregó Montes de Oca, antes de reconocer que la relación entre las corrientes de opinión internas ha mejorado estos últimos dos años.