Dos eventos institucionales se desarrollaron ayer vinculados a los 37 años del golpe de Estado y las acciones de la sociedad civil para la recuperación de la democracia. A partir de las 19.00 en la Intendencia de Montevideo se exhibió la pancarta que fuera colocada en noviembre de 1983 en el acto del Obelisco, cuando 400 mil personas inundaron sus alrededores en el denominado “río de libertad”. “Por un Uruguay democrático sin exclusiones”, auguraba el cartel que flanqueó al actor Alberto Candeau durante la lectura de la plataforma leída en la ocasión, considerada como el último empujón civil para la salida de la dictadura.

El objeto fue hallado en sus talleres por Andamios Tubulares, la empresa que armó y desarmó el estrado y que lo donó a la comuna, que a su vez, tal como lo confirmó anoche el director saliente de Cultura, Mauricio Rosencof, lo entregará al Museo de la Memoria. Además del jerarca, también participaron de la ceremonia la intendenta Hyara Rodríguez y la dirigente nacionalista Matilde Rodríguez Larreta. Sobre el mediodía había tenido lugar la otra actividad, en este caso en el Parlamento.

Fue la presidenta de la Cámara de Diputados, Ivonne Passada, quien dio apertura al ciclo de reflexiones en el marco de las actividades que cada años realiza la comisión de Derechos Humanos al conmemorarse el aniversario del inicio formal de la dictadura, el 27 de junio de 1973. Esta vez el tema giró en torno a la consigna “A 37 años del golpe de Estado, la dictadura desde la óptica del exilio”. Al inicio se pidió especialmente que las actas taquigráficas y las grabaciones de la sesión se hagan llegar “a la patria peregrina”.

Entre los asistentes al acto estuvo el diputado colorado de Vamos Uruguay, Fernando Amado, echando así por tierra la versión de prensa difundida el sábado, acerca de que el lider sectorial, Pedro Bordaberry, había ordenado que los integrantes de esa colectividad no asistieran a este tipo de acontecimientos. Expusieron sus historias Matilde Rodríguez, Ricardo Leiva, Adriana Pereda, Luis Nieto, Braulio López, Raúl Legnani y Eduardo Galeano, que se retiró antes para ver el partido Chile-Brasil. “Fueron intervenciones muy emocionantes. Sobre todo la de Nieto. Contó que cuando militaba en el MLN compró un terrenito, pero tuvo que irse y enterrar unas armas, pero cuando volvió estaba lleno de flores”, resaltó la ex vicecanciller Belela Herrera.