Las encuestas se realizaron entre el 21 de setiembre y el 26 de octubre de 2009, con muestras representativas del 100% de la población de cada uno de los 18 países latinoamericanos. En líneas generales, se constata que los habitantes de la región tienen una visión más positiva de su país y del mundo que en 2003, fecha de la última medición. En aquel momento sólo 27% creía que el mundo iba en la dirección correcta, mientras que actualmente 41% lo piensa. En el informe se señalan como causas de este aumento de optimismo los años de crecimiento económico y los cambios de gobierno en varios países. En Uruguay se registra una percepción positiva del rumbo del país (59% cree que se va en la dirección correcta) que contrasta con cierto pesimismo sobre el rumbo del mundo: sólo 35% cree que va en ese rumbo.

En América Latina los optimistas son mayormente hombres, de derecha y con estudios superiores, mientras que los pesimistas son sobre todo mujeres, de izquierda y con educación básica. “Son los más excluidos de la sociedad los que más rechazan el mundo”, concluye el informe.

Dale potencia

Los uruguayos tienen mayoritariamente una visión amigable sobre Estados Unidos (73%), la Unión Europea (67%) y España en particular (53%), pero la aceptación se reduce en los casos de China (47%) y Cuba (44%). Según el informe, Estados Unidos se gana la simpatía de la mayoría de los países de América Latina y Cuba es la que cosecha los mayores rechazos de los siete países o bloques que figuran en el informe (Estados Unidos, España, Japón, Unión Europea, Canadá, China y Cuba).

En América del Sur, Ecuador, Brasil, Colombia y Chile tienen mejor aceptación de Estados Unidos que Uruguay, mientras que en Perú, Paraguay, Venezuela, Bolivia y Argentina es menor. Con respecto a Cuba, los paraguayos, chilenos y bolivianos son más benévolos que los uruguayos, al tiempo que los argentinos, brasileños, peruanos y colombianos tienen una opinión más desfavorable de la isla caribeña que los uruguayos.

Para la Corporación Latinobarómetro, estos resultados dan cuenta de que “la imagen de estos países no está basada en la historia sino en el presente y sus circunstancias”.

We are fantastic

El perfil de los latinoamericanos que tienen una opinión favorable de Estados Unidos se conforma mayormente por jóvenes (67% de ellos tiene una buena opinión de ese país), de educación superior (70%), hombres (75%) y de ingresos altos (77%). Las personas de derecha tienen una visión ampliamente positiva (83%) aunque también se constata ese sentimiento en la izquierda (70%). Curiosamente, este perfil se repite para el caso de Cuba, por lo que el informe concluye que la evaluación de ambos países no responde solamente a factores ideológicos sino también a la posición de la persona en la sociedad; los más excluidos tienden a tener una opinión desfavorable de ambos países. No obstante, lo ideológico también influye: 55% de los latinoamericanos de izquierda tiene una buena opinión de Cuba. Este porcentaje baja a 35% para los latinoamericanos de derecha.

De los países sudamericanos, Uruguay es el que tiene la mejor percepción de las relaciones con Estados Unidos: 91% de los orientales respondió que son buenas, porcentaje que sólo superan Costa Rica y Puerto Rico. En tanto, Venezuela, Bolivia y Argentina son los que tienen la peor consideración acerca del vínculo bilateral con Estados Unidos. Con la asunción de Barack Obama aumentó la percepción de los sudamericanos de que Estados Unidos respeta a sus países: pasó de 38% en 2006 a 63% en 2009.

El 70% de los uruguayos cree que la influencia de Estados Unidos en la región es positiva. Pero al mismo tiempo son los que mejor evalúan la influencia venezolana en América del Sur (excluyendo a los propios venezolanos): 49% entiende que es positiva. Colombia es el país que peor evalúa la incidencia del país caribeño. En Argentina y Bolivia, pese a la buena relación de sus gobiernos con la administración de Hugo Chávez, sólo 26% y 39%, respectivamente, juzgan positiva la influencia de Venezuela.

Integrados

La medición también refleja que nuestro país es el que más apoya la integración económica (84% de los consultados dice estar a favor) y también el que más apoya la integración política junto con Argentina (71%). En general, los latinoamericanos están más dispuestos a la integración económica que a la política. Paraguay y Ecuador son los que muestran mayores reticencias a la integración, tanto económica como política. Chile y Bolivia son los que más diferencias presentan entre integración económica e integración política (a favor de la primera).

Por otra parte, Venezuela es el país que tiene el mayor nivel de conflictos con el mundo, percibido esto por sus propios ciudadanos, mientras que Uruguay es el que advierte el menor nivel de conflictos o bien la ausencia de ellos.