Qué golazo, Tabaré
Vázquez estuvo a cargo de una de las subcomisiones organizadoras del Mundialito de 1980, aquel que reunió en Montevideo a los campeones de las copas del mundo y que organizaron entre diciembre de 1980 y enero de 1981 la Federación Internacional de Fútbol Asociado (FIFA) y la dictadura uruguaya. El dato lo confirmó el viernes en Radio Uruguay Andrés Varela, guionista de la película documental Mundialito, que se estrenará en Uruguay la última semana de setiembre, pero que antes participará en un festival en Brasil y que ya fue seleccionada por la cadena deportiva ESPN para ser emitida antes de que termine 2010. La relación del primer presidente de izquierda en el país y el evento deportivo quedará reflejada en el material, el tercero de corte histórico que produce Coral Films, después de Cachila y La Matiné. Sin embargo, fue el único que bajo la administración Vázquez no recibió apoyo de la Presidencia: “Él [Vázquez] dirigía una de las comisiones, la comisión de tesorería del Mundialito de 1980. Nos negaron el interés nacional y la propia entrevista varias veces porque no se querían asociar en este tema, y capaz que la mejor forma de asociarse a determinados temas sea clarificando”, opinó. Varela anunció que insistirán con el pedido de que la producción sea tenida en cuenta por el Poder Ejecutivo, y explicó que la hipótesis de trabajo inicial buscó establecer si el evento uruguayo fue una réplica del campeonato del mundo realizado en Argentina en 1978, en el sentido de desviar la atención de la ciudadanía y el mundo sobre los crímenes de lesa humanidad que se estaban cometiendo en ambos países, apelando a la pasión popular que desata el fútbol entre los rioplatenses. Tanto Argentina como Uruguay salieron campeones, pero a diferencia de lo ocurrido del otro lado del río, los uruguayos aprovecharon la ocasión y, por ejemplo, en la final contra Brasil desde las tribunas del estadio Centenario comenzó espontáneamente un solo grito: “Se va acabar, se va acabar la dictadura militar”.
El 2 de julio, el organismo internacional de crédito emitió un comunicado público bajo el título “Grupo asesor regional del FMI para el Hemisferio Occidental indica que el Fondo debe alcanzar equilibrio entre economía y política”. Según el texto, el grupo asesor para el Hemisferio Occidental que se reunió en San José (Costa Rica) el 1º y 2 de julio es un “panel independiente de expertos de alto nivel constituido recientemente, que asesora al FMI sobre su labor en la región”. Está integrado, entre otros, por los ex presidentes Óscar Arias, de Costa Rica, y Ricardo Lagos, de Chile, el secretario general iberoamericano, Enrique Iglesias, y Tabaré Vázquez, y coordinado por Nicolás Eyzaguirre, director para las Américas del FMI.
Días después, los medios uruguayos se hicieron eco de la información titulando “Vázquez asesora al FMI”. Ante esta situación, el ex primer mandatario resolvió comunicarse con Brovetto y el presidente del FA transmitió el jueves pasado al Secretariado Ejecutivo de la coalición de izquierda que es “falso” que Vázquez asesore al Fondo. Se pidió además que esto se difundiera en los distintos ámbitos de la fuerza política. En el Secretariado no hubo cuestionamientos.
El viernes, el titular de la Comisión Nacional de Propaganda del FA, Jorge Galzerano, envió un comunicado haciendo dos puntualizaciones. En primer lugar, que Vázquez no participó en la reunión en Costa Rica el 1º y 2 de julio y en segundo lugar, que “participaría en una reunión que se llevaría a cabo en los próximos meses expresando su posición crítica sobre el tema convocado y haciendo llegar la misma a la fuerza política para su conocimiento”.
Cuestión de términos
Brovetto explicó a la diaria que se quiso hacer esta aclaración porque la información que apareció en el comunicado del FMI era “confusa”, primero porque daba a entender que Vázquez estuvo presente en la reunión de Costa Rica, y el ex presidente no estuvo “ni físicamente ni envió recomendaciones”. Y segundo, porque “cuando se dice grupo asesor uno se imagina un cargo rentado, y eso es absolutamente falso”, afirmó Brovetto.
En cambio, el FMI propuso a Vázquez participar “en un panel con ex jefes de Estado, como Arias y Lagos, para decir su opinión sobre las políticas del FMI con América Latina”, aclaró el presidente del FA. Según Brovetto, Vázquez aún no sabe cómo se organizará este panel; si consistirá simplemente en que cada integrante elabore una ponencia o si funcionará como un grupo de trabajo con reuniones periódicas.
Lo que sí se sabe -según confirmó a la diaria el secretario personal de Vázquez, Eduardo Bandeira- es que el 11 de octubre habrá una conferencia en la que se presentarán estas evaluaciones. Brovetto aclaró que Vázquez no percibe ningún dinero por su actuación. “Sólo le pidieron y él estuvo de acuerdo. Me parece muy importante que se digan las profundísimas críticas a las políticas del FMI, que llevaron a nuestro país a situaciones impensables”, manifestó el presidente del FA.
Reincidente
No es la primera vez que Vázquez participa en actividades organizadas por organismos multilaterales de crédito. Por lo pronto, el ex presidente de la República integra una mesa de trabajo sobre gobernabilidad y desarrollo social del Banco Mundial (BM), junto con el ex presidente de Chile Ricardo Lagos y el ex presidente de Brasil Fernando Henrique Cardoso.
En este marco, expuso el 19 de abril de este año en un foro organizado por el BM con una ponencia titulada “América Latina después de la crisis: la agenda política y social para la reconstrucción”. Allí manejó conceptos como “el capitalismo se enloqueció”, “el mundo parece un manicomio dirigido por sus propios enfermos” y “Latinoamérica ha hecho una profesión del quejismo” y culpa siempre “al imperialismo, aunque no sabemos cuál: español, portugués, inglés, estadounidense”. En aquel entonces destacó el vuelco que a su entender han tenido “los organismos internacionales con sede en Estados Unidos promoviendo, con ciertas urgencias, directivas claras para favorecer políticas de reducción de deudas y de apoyo a los sectores sociales”.
En el comunicado emitido el 2 de julio, el presidente del FMI, Dominique Strauss-Kahn, expresó su confianza en que el grupo que Vázquez integra “potencie la labor del FMI en el continente americano, aportando puntos de vista sobre las cuestiones fundamentales de la región y profundizando nuestra concepción de las inquietudes de los principales responsables políticos y autoridades económicas”.
El pasaje de una crítica cerrada a los organismos multilaterales de crédito por parte de la izquierda a acercamientos de este tipo está enmarcado en una discusión sobre el rol que instituciones como el FMI y el BM desempeñan en la región y cómo deben componerse sus estructuras directivas. También está acompañado por la asunción al frente de esos organismos de dirigentes vinculados a la izquierda, como el caso de Strauss-Kahn en el FMI (vinculado al Partido Socialista francés) y el también socialista Pascal Lamy en la Organización Mundial de Comercio. “El FMI tiene que dar un paso a la izquierda”, consideró un integrante del Poder Ejecutivo de Uruguay. Otros se preguntan si eso es posible, o si convendría apostar a otro tipo de instituciones financieras.