Las obras estarán terminadas a finales de agosto y los primeros traslados se harán en setiembre. El ministro del Interior, Eduardo Bonomi, y una delegación parlamentaria recorrieron ayer la nueva cárcel de Punta de Rieles, con capacidad para 650 personas, que llegarán desde otros centros. La selección estará a cargo de un equipo técnico-disciplinario de la Dirección Nacional de Cárceles, que ya viene trabajando en el tema. “Cuando empezamos con la idea de descongestionar las cárceles, incluso en conversaciones con la senadora Lucía Topolansky, nunca imaginamos que dos años después íbamos a ver las obras como están ahora.

Estamos, sin dudas, frente a un establecimiento modelo”, enfatizó el diputado Víctor Semproni (Espacio 609). También fueron de la partida los senadores de Alianza Nacional Jorge Larrañaga, Carlos Moreira y Eber Da Rosa y el diputado de ese sector Javier García que durante el gobierno anterior impulsaron, a través de la Rendición de Cuentas, una normativa que habilitó al Ministerio de Defensa a transferir predios en régimen de comodato a la Dirección de Cárceles. Semproni opina que el nuevo establecimiento, ubicado en un predio de 42 hectáreas, significará una mejora sustantiva para los reclusos que allí sean alojados y que podrían, entre otras tareas, desarrollar la producción agrícola. “Una buena iniciativa para garantizar la convivencia sería que todo aquel recluso que transgreda las normas tenga que regresar a su lugar de origen”, propuso el diputado frenteamplista.