La propuesta final que el embajador itinerante y ex ministro de Trabajo, Julio Baráibar, le presentó a la Unión Ferroviaria (UF) para la reestructura de la Administración de Ferrocarriles del Estado (AFE) no sería aprobada por el sindicato del ente, que de todas maneras no ha transmitido una respuesta definitiva.

Los trabajadores ferroviarios recibieron la propuesta modificativa de Baráibar el jueves 30 de setiembre, y ayer, durante una asamblea, el sindicato informó a sus delegados los contenidos de la propuesta gubernamental.

Según comentó a la diaria el secretario general del gremio, Ricardo Cajigas, en el encuentro de la UF la dirección solamente informó sobre los alcances de la propuesta del Poder Ejecutivo. “Se puso a consideración de las bases”, sintetizó el referente del sindicato, quien agregó que la posición final del gremio se conocerá en una próxima asamblea que probablemente se desarrolle después del congreso del PIT-CNT, que se llevará a cabo entre el jueves 6 y el sábado 8.

Cajigas informó que hay tres posibilidades respecto a la alternativa planteada por Baráibar: “O bien se acepta la propuesta, o se entiende que es necesario seguir negociándola, o se considera insuficiente y se continúa con las medidas de lucha”. No obstante, dijo que entre los delegados que la empezaron a analizar ayer, “el ambiente abarcaba más bien las últimas dos posibilidades”. “No había clima para aceptarla así como está”, resumió Cajigas.

Si bien el secretario general de la UF prefirió no adelantar detalles del contenido de la propuesta, anunció que desde el gobierno se le comunicó que “no hay posibilidades de cambiar el hecho de que la operadora sea una sociedad pública de derecho privado”.

De todas maneras, Cajigas especificó que desde el Poder Ejecutivo se daban “garantías de que íbamos a conservar muchos de los derechos de los actuales trabajadores de AFE”. No obstante, indicó que “muchísimos de los compañeros decían que no estaban todos los derechos garantizados”. Justamente, el principal punto que separaba al sindicato de la propuesta inicial del Ejecutivo era el traspaso de parte de los trabajadores al derecho privado, en lo que sería la futura operadora ferroviaria, que estaría conformada 51% por AFE y 49% por la Corporación Nacional para el Desarrollo. De todas maneras, el Ejecutivo también dispuso que los trabajadores que quisieran volver de la operadora a la parte de infraestructura -que sí se mantendría bajo el derecho público- podrían hacerlo.