La resolución del Ministerio de Relaciones Exteriores del 21 de setiembre designa como embajador itinerante a Romero Rodríguez, quien esta semana presentará un plan de políticas públicas para la población afrodescendiente. El flamante embajador comenzó su militancia social en organizaciones sociales y en los últimos 11 años se desempeñó como técnico especializado en discriminación racial para Naciones Unidas en varios países de América Latina, siendo los últimos Brasil y Ecuador. Durante la administración pasada fue asesor en esta materia del entonces presidente Tabaré Vázquez.

Los destinos del embajador aún no están definidos. Pero una de sus líneas de acción apuntará a los países africanos. “Uruguay tiene allí misiones de paz. La descendencia africana en nuestro país en su gran mayoría proviene del África subsahariana. Sin duda, hay que extremar algún tipo de lineamiento y construir un área social, cultural y de intercambio”, adelantó Rodríguez en diálogo con la diaria.

Asimismo, señaló que su designación se produce en el Año Internacional de los Afrodescendientes, y Uruguay, al igual que otros estados, asumió compromisos internacionales para atacar las situaciones de pobreza por motivos étnicos-raciales. “Las ausencias de políticas en nuestro país en este sentido, mediante su trayectoria, generó una cultura de la negación. Los datos estadísticos rompen la vista de por qué un sector de la población tiene tanta diferencia con otros”, apuntó.

Durante este gobierno, se instaló en la órbita del Ministerio de Educación y Cultura (MEC) un equipo de trabajo encargado de aportar insumos para un Plan Nacional contra el Racismo y la Discriminación. La primera etapa culminó el 30 de junio con la presentación de 14 informes sobre las distintas poblaciones en situación de discriminación étnico-racial, por género, discapacidad, patologización (por ejemplo, los portadores de VIH-Sida), por identidad y orientación sexual, por privación de libertad, entre otros.

Los informes no fueron presentados públicamente pero están disponibles en el sitio del MEC. El de afrodescendientes destaca, entre otras cifras, que 50% de esta población vive en hogares bajo la línea de pobreza. Y que, a su vez, la población menor de 20 años alcanza 13% dentro de la población afrodescendiente, y 67% de las niñas y niños afrodescendientes menores de 12 años vive en hogares pobres.

El nuevo embajador ya mantuvo reuniones con Javier Miranda, titular de la Dirección de Derechos Humanos del MEC, que tiene a cargo desarrollar y ejecutar políticas públicas en estos temas. Para Rodríguez, la autoidentificación étnica que surja de Censos 2011 será un insumo importante a la hora de delinear acciones afirmativas.

“Hay que tomar medidas antidiscriminatorias pero también profundamente antiracistas. Muchas veces se tiende a confundir discriminación con racismo. Tenemos que tener claro que la discriminación es una de las consecuencias. Mi rol va a ser abocarme a este tema, mirarlo. El hecho de que se ponga a un embajador para los temas afro demuestra que estamos reconociendo una ausencia de políticas”, evaluó.

El ex coordinador del Plan Nacional contra el Racismo y la Discriminación, quien ya retornó a su militancia social en la organización de diversidad sexual Ovejas Negras, consideró desde ese rol y en diálogo con la diaria que “lo óptimo” es lograr un “abordaje global”, es decir, “desde todas sus formas”. De todos modos, opinó que la designación de un embajador específico para la población afro le parece “un gesto interesante” en la medida en que el Estado uruguayo “reconoce una de las formas de desigualdad, aunque el año internacional ya se esté terminando”.

La figura de embajador itinerante se creó en diciembre de 2010 en la Ley de Presupuesto Nacional. Estos funcionarios diplomáticos, según establece la norma, deben cumplir “con los cometidos que el Poder Ejecutivo les asigne específicamente”, y actuarán en el marco de la Convención de Nueva York sobre las Misiones Especiales de 1969. El canciller Luis Almagro dijo, durante una conferencia de prensa, que los embajadores itinerantes tendrían cometidos en áreas como las misiones de paz, derechos humanos y el fortalecimiento en materia comercial y empresarial.