En el FA, algunos aguardan el informe de Brovetto con “moderado optimismo”. Otros expresaron “no tener demasiadas expectativas” para el lunes pero mantienen “la esperanza de que se resuelva de alguna manera”. Todos los dirigentes consultados por la diaria coincidieron en que la instancia es “clave”. “Tan clave es que se decidió no suspender la mesa [por las celebraciones del Bicentenario] porque esto es impostergable”, destacaron.

Según pudo saber la diaria, en la sesión del lunes hubo planteos para que Brovetto informe sobre las gestiones con los senadores frenteamplistas Fernández Huidobro, Rodolfo Nin Novoa (Alianza Progresista) y Jorge Saravia (Espacio 609) quienes manifestaron en varias oportunidades su negativa a votar afirmativamente el proyecto para dejar sin efecto la Ley de Caducidad, que ya tiene media sanción.

Esta tarea que asumió Brovetto a principios de noviembre a pedido de la mesa política la desarrolló “en el más absoluto hermetismo” y sin rendir cuentas sobre los avances o retrocesos en ese órgano de conducción ni en el secretariado ejecutivo hasta la fecha. En esos ámbitos consideran que un pronunciamiento formal del presidente del FA “es necesario” en la medida que servirá como insumo para el plenario del 19 de marzo que tiene el tema en el orden del día.

Que sí, que no

A nivel parlamentario, el asunto está estancado en la comisión de Legislación y Constitución del Senado -que integran Fernández Huidobro y Nin, entre otros- donde se recibieron numerosos catedráticos que ofrecieron su opinión sobre el proyecto pero donde no hay señales claras de que se inicie la discusión política. Desde la bancada del FA confirmaron a la diaria que la única certeza hasta el momento es que la iniciativa no se llevará al plenario si los votos no están asegurados porque eso sería “un error político”. También admitieron -aunque sin dar detalles- que existe la posibilidad de negociar modificaciones en la redacción del texto si hay voluntad política para alcanzar un acuerdo.

Consultado por la diaria, Fernández Huidobro confirmó que mantuvo una reunión con Brovetto por este tema dos semanas atrás. El senador recordó que el 14 de noviembre el comité ejecutivo de la CAP-L resolvió no apoyar el interpretativo pero aclaró: “En virtud de que se acerca el plenario en los próximos días vamos a realizar una nueva reunión para saber qué hacer”. “No nos vamos a tomar todo el tiempo del mundo porque los tiempos apremian”, añadió.

Sobre las posibilidades de un cambio de postura si el texto es modificado se limitó a expresar que “está todo abierto” y que su argumento para no votar el texto es que contiene “inconstitucionalidades”. “Siempre estuvimos dispuestos a encontrar fórmulas de acuerdo”, subrayó.

Nin Novoa dijo a la diaria que sigue “en la misma postura” porque el Parlamento “no puede anular leyes” y negó que en las conversaciones con Brovetto se haya manejado la posibilidad de que salga de sala o deje entrar a su suplente, Gustavo Guarino, quien está a favor de la iniciativa. La única forma de que cambie su postura, aseguró, es que el texto proponga una derogación. Por último, Saravia continúa en la misma postura: “Por vía parlamentaria no voy a acompañar nada”. Según dijo a la diaria, luego de la reunión que mantuvo el 30 de octubre con Brovetto, no volvió a hablar con él: “Lo que le dije le alcanzó y le sobró para saber que yo no cambio en política”.