Dirigentes del Partido Nacional (PN) ven “con preocupación” que la empresa Argencobra, a la que está vinculado el presidente del Real Madrid, Florentino Pérez, haya quedado en el primer lugar de una licitación de UTE para la línea de interconexión eléctrica San Carlos-Melo. Ayer el senador Luis Alberto Lacalle ingresó a la Comisión de Industria y Energía del Senado para preguntarle al ministro Roberto Kreimerman por los cometidos del viaje en noviembre de una delegación gubernamental a España, cuando Mujica mantuvo un encuentro con Pérez .
“A él [Lacalle] nunca le gustó este viaje de Mujica y es un tema que lo tiene preocupado, sobre todo porque había privados en el medio”, dijo a la diaria el senador herrerista Luis Alberto Heber, seguramente en referencia a la participación de Francisco Paco Casal. En comisión, Kreimerman explicó que en España “se contactaron varias empresas” para que inviertan en Uruguay, y que además el proceso de adjudicación “no está terminado”, según la frenteamplista Susana Dalmás. “Se presentaron muchas empresas, algo que antes no pasaba”, agregó Dalmás.
No sólo Lacalle sigue con atención este asunto en el PN. “No queda bien que una empresa que participa en licitaciones del Estado sea, a diferencia del resto de los oferentes, visitada por el presidente un tiempo antes y que luego resulte ganadora. Eso, en principio, no tiene buena apariencia”, dijo a la diaria el diputado Jorge Gandini (Alianza Nacional). El fin de semana, José Mujica confirmó a este medio que la compañía vinculada a Pérez ganó esta licitación con 12 millones de dólares menos que la que entró segunda. “Participaron alrededor de 15 empresas transnacionales para hacer esta línea, que nos va a permitir conectar con potencia con el sur de Brasil”, adelantó el mandatario.
La propuesta de Argencobra, analizada en primera instancia por una comisión de técnicos de UTE, fue de 89 millones de dólares, por debajo de la segunda oferente, que licitó por 101 millones. La adjudicación de las obras aún no se concretó y las empresas que perdieron podrían presentar sus descargos ante UTE. A finales de julio de 2010, el presidente de UTE, Gonzalo Casaravilla, explicó que el total de la inversión de la interconexión con Brasil costaría unos 330 millones de dólares. Esa cifra incluye el tramo San Carlos-Melo, la instalación de una conversora y, finalmente, la línea que terminará en Candiota, en Río Grande do Sul. Para financiar la primera etapa, según estimaba Casaravilla, 80 millones serían aportados por el Fondo de Convergencia Estructural (Focem) del Mercosur.
“Por ahora he solicitado información, quiero saber si hay algún vínculo entre el viaje de Mujica y el resultado de esta licitación. Una cosa como ésa sería algo muy preocupante”, aventuró Gandini. Considera que “no es bueno” que una empresa que participa en un proceso licitatorio con estas características tenga “ciertas vinculaciones” con el gobierno, ya que de ahí “podría inferirse que hay un favoritismo”; fuentes del PN confiaron que su representante en el directorio de UTE, Enrique Antía, se ha comunicado en los últimos días con dirigentes del partido para interiorizarlos sobre esta situación. Entre otras cosas, les comentó que la empresa de Pérez, con quien Mujica se reunió en noviembre en Madrid, tiene todavía una “presencia muy chica” en el país, por ejemplo en la subestación de La Pastora, en Maldonado. “Por ahora lo que estamos haciendo es analizar en profundidad los resultados de la licitación”, se limitó a decir Antía, consultado por la diaria.