Al ritmo del solista de cumbia de Salto Mario Silva, llegó el presidente José Mujica ayer a la carpa de autoridades del festejo del Bicentenario, del brazo de Lucía Topolansky, como si le sirviera de protección ante la multitud que se le venía encima. Allí ya estaban hacía rato algunos ministros junto con otras autoridades del gobierno y del Frente Amplio, sin despertar demasiado la curiosidad de los habitantes de Mercedes. Esa indiferencia general se extendió hacia algunos legisladores, como Ivonne Passada, Jorge Gandini, Javier García y Roque Arregui. El que más cámaras concitó fue el intendente Guillermo Besozzi, para quien “la movida” que se generó “favorece mucho al departamento”, según reconoció en conversación con la diaria. “Es impresionante lo que se ha hecho, y reconozco el trabajo de Presidencia junto con el departamento”, afirmó.

En ese sentido, el intendente coincidió con la postura de Alianza Nacional de realizar una oposición constructiva respecto al gobierno. “Hay que pensar en un país unido, yo no creo en las oposiciones viejas de antes, de dar palo y palo para ver si podés hacerlos saltar”, entendió.

Al entrar, Mujica dio su versión sobre la importancia del festejo: “Los pueblos tienen que mirar atrás para juntar mística y seguir hacia adelante”. Luego fue cuestionado porque “varios jóvenes no saben de qué son los 200 años”, a lo que Mujica respondió que “somos una nación muy nueva”. “[El presidente Bernardo] Berro dijo allá por 1860 que primero tuvimos la Constitución y después tuvimos que hacer el país. Y hoy un poco estamos en eso. Hay muchas cosas que hay que enraizar en nuestra propia gente para construir un nosotros”, afirmó.

Tras ingresar a la carpa de autoridades, Mujica fue recibido por las autoridades departamentales y luego compartió una mesa con sus ministros, autoridades locales y de gobierno y legisladores. Más tarde, el intendente Besozzi lo invitó a presenciar el espectáculo -a esa altura ya no tocaba Silva- que se ofrecía desde el escenario, ubicado de espaldas a la carpa. El intendente comentó a la diaria, que sostuvo un pequeño diálogo con él en la carpa: “Hablamos del grano, del campo, de lo bien que están los sembrados, del río y de las cualidades del departamento, y algunos temas políticos, como la relación con Argentina”. Según sostuvo el intendente, “con Argentina no podemos ir a pelearnos, sino que hay que llevar las cosas de la mejor manera. Y el presidente está haciendo bien porque está haciendo una política a mi entender de diálogo con ellos, que es la que tiene que llevar”.

Con respecto a las relaciones con Argentina, Mujica se refirió a las “trabas comerciales” que lo motivaron a viajar el viernes a ese país. Según dijo, “los empresarios -uruguayos- siempre se van a quejar y siempre se han levantado” (ver página 11). Comentó que la liberación de América Latina se está “intentando”, pero advirtió que “hay que empezar por librarnos a nosotros mismos”. Al explicar ese concepto volvió a arremeter contra los empresarios que reclamaron por las trabas: “Si se le trancan cuatro negocios que no pueden vender, ya les parece que el mundo se viene abajo. Y no se viene nada abajo. Si siempre fue así, mañana vamos a hacer otros negocios y seguimos andando. Ahora nos van a dejar entrar a vender carne desosada de cordero en Estados Unidos. Y eso lo empezamos una vez que vino [George] Bush acá. Despues de años y años conseguimos eso. Lo imposible cuesta un poco más”.

Un poco más marxistas

“A mí me preocupa la tierra que no se trabaja, y de eso vamos a hablar. Tendríamos que ser un poco más marxistas y ver el brutal cambio de las fuerzas productivas que se ha procesado. Andamos con consignas de hace 70 años en un mundo que camina distinto”, opinó Mujica, en entrevista con Televisión Nacional, consultado sobre el proceso de concentración de la tierra. También se refirió a la relación con Argentina. Reiteró que “necesitamos luchar desesperadamente por la unidad nacional”. Dijo que desde hace cuatro años está trabajando para recomponer la relación con ese país y “lo único que hacían era darme palos”. En una nueva referencia a las quejas de los empresarios, se preguntó por qué éstos “no acompañan, por qué no ayudan, por qué no se callan la boca, por qué no tienen un sentido de unidad nacional”. Consideró que hay “falta de madurez” en sus planteos. “Tienen que ayudar al gobierno, pero no, escupen el asado”, cuestionó. Mujica también se refirió a su primer año de gestión, que se cumple mañana. Aseguró que está “contento”. “Yo no trabajo para las encuestas ni me voy a callar”, advirtió.