En la mesa participaron tres frenteamplistas de base, el escribano Alberto Bensión y los abogados Janet Darias y Walter de León, además de una militante del MPP, Sara Raíces. En sus exposiciones coincidieron en que es importante no eludir la discusión respecto a la convocatoria a una Asamblea Constituyente y en la necesidad de colocar esta discusión en la interna frenteamplista como paso previo para trasladar el debate a toda la ciudadanía. Dijeron además que una reforma constitucional “no es sólo para abogados”.
“Primero tenemos que instalar el tema entre nosotros. Tenemos que hacer entender que esto no es un trabajo jurídico ni burocrático sino un trabajo político, para luego instalarlo en la gente. Debemos hacer entender que ésta es una herramienta para edificar un nuevo proyecto de país”, resumió Bensión. “La Constitución a veces se ve como un librito jurídico difícil, pero no es tan difícil ni una cosa tan rara. La definición de la Constitución es la definición del país”, completó De León.
Temas
La abogada Darias enumeró los temas que deberían introducirse en una “nueva Constitución”. Hizo hincapié en que la extranjerización y la concentración de la propiedad de la tierra deberían estar incluidos en los cambios constitucionales, aunque afirmó que la aprobación de una ley para proteger la tierra debería ser inmediata. En materia de temáticas ambientales, enumeró temas como el aire y todo lo que “no pueda llevar a conservar los recursos naturales y la biodiversidad”, así como la necesidad de tener en cuenta temas como la proliferación de armas químicas, biológicas y nucleares. En el caso del agua advirtió que debe quedar explicitado que es “un derecho fundamental”.
Otros puntos a abordar en una reforma, según Darias, son el monopolio privado, los medios de generación de energía, los deberes y obligaciones de los medios de comunicación, la elección directa de la Suprema Corte de Justicia. En cuanto a los derechos humanos, se enfocó en los de género, incluidos los sexuales y reproductivos, los de los discapacitados, los consumidores, las personas adultas mayores y las privadas de libertad. Al mismo tiempo, apuntó a explicitar el delito de tortura, el secuestro de personas, las medidas prontas de seguridad y todo lo vinculado al terrorismo de Estado. Darias indicó que también debe incluirse la protección de niños y adolescentes que hoy está en el Código Penal pero no en la Constitución, y consideró que los tratados internacionales deben formar parte de ésta.
El abogado recordó que la conformación de una Constituyente es una de las resoluciones que adoptó el Congreso del FA, que está en el programa de gobierno y que recientemente la comisión frenteamplista de estrategia la ratificó y la trasladó al plenario, aunque éste todavía no ha tratado el tema. En cuanto a los tiempos, estiman que es “un trabajo a mediano plazo”. “Sería ideal que tomara el tema quien fuera candidato del FA como buque insignia. Cuando yo era joven, hace muchos años, pensaba que la revolución pasaba por las armas; hoy pienso que puede pasar por hacer una nueva Constitución que plasme los temas estratégicos”, indicó Raíces.
No se queden
“Tenemos que hacerlo por si ganamos y por si perdemos el gobierno. Porque esto es la garantía de que no nos cambien el Estado que queremos para dentro de 20, 30 o 40 años”, destacó De León. Raíces, en tanto, llamó a “discutir sin miedo a dividirnos”. “La unidad va a estar en esta discusión. La Constitución hay que hacerla toda de nuevo aunque haya cosas que sirvan. Cambiar un poquito de algo no vale la pena. No se quiere discutir y no se ayuda a que se discuta. Si no discutimos bien entre nosotros ni somos capaces de convencer a nuestros compañeros para, luego de eso, salir a la sociedad, todo esto no va a funcionar”, añadió tras recordar que la reforma debe ser avalada en las urnas.
La militante emepepista mostró preocupación por el “achatamiento” que existe en la militancia frenteamplista. “No se quiere discutir a fondo los temas, y cuando se pregunta por qué no la respuesta es: ‘Si empezamos a discutir mucho nos dividimos, mejor nos quedamos así’. Y 'quedar así' significa que suceda lo mismo que en el tratamiento de la PPP [proyecto de Ley de Participación Público-Privada], que es lo más reciente, pero pasó también con la Ley de Educación. La votamos pero estamos pagando el precio de no haber discutido”, afirmó.
A su vez, Raíces responsabilizó a José Mujica de esta situación. “El compañero presidente un día se levanta con lo del plebiscito consultivo. Intentamos abordar el tema y cuando lo estamos logrando -porque nadie lo quiere discutir mucho-, ya nos levantamos al otro día con otro tema, el impuesto al agro. No hay demasiado ambiente en profundizar, pero al otro día tenemos otro tema, la ley de impunidad”, enumeró. “Es más fácil no discutir y convivir que discutir y buscar acuerdos unitarios, y hacer avanzar a la sociedad en su conjunto. Si la discusión es un método de aprendizaje entre nosotros, vamos a dar esta discusión para la que no sólo precisamos abogados”, concluyó Bensión.