El intendente de Canelones, Marcos Carámbula, asumió ayer la presidencia del Congreso de Intendentes (CI) teniendo como “tema prioritario” la resolución de la guerra de las patentes, a partir de la propuesta que está actualmente en negociación con el Poder Ejecutivo. Ayer los cinco intendentes frenteamplistas se reunieron con el prosecretario de Presidencia, Diego Cánepa, y con el director de la Oficina de Planeamiento y Presupuesto (OPP), Gabriel Frugoni, para conocer los detalles de la propuesta. Según contó luego de varias horas de reunión el intendente de Rocha, Artigas Barrios, “todos manifestamos acuerdo”. La meta sería aprobar el proyecto en el CI en agosto.

El Ejecutivo propone crear una agencia fiduciaria encargada de recaudar las patentes en todo el país, y cobrar montos únicos de acuerdo al modelo de los vehículos. La agencia, que estaría dirigida por OPP, representantes del CI y el Ministerio de Economía (MEF), entregaría los recursos a cada intendencia en función de los empadronamientos. La propuesta incluye que los vehículos anteriores a 1975 no pagarán patente (aunque tendrán que tener una habilitación para circular), los de 1976 a 1981 pagarán cerca de 1.000 pesos, los de 1982 a 1985, 2.000, de 1986 a 1989, 3.000 y los de 1990 y 1991, 4.000. Desde el gobierno se valora que esto tendría fuerte impacto, ya que, según manejó Cánepa, 30% de los vehículos del parque automotor corresponde a autos anteriores a 1980. El resto pagaría un promedio de los valores de las patentes más caras y las más bajas, y los vehículos 0 kilómetro pagarán los mismo que pagan hoy en Montevideo, el 4,5% del valor del auto sin IVA.

Para equilibrar las cuentas de las intendencias que perderán autos, el gobierno otorgará hasta 2015 un subsidio que asegure a todos los gobiernos departamentales los ingresos que tuvieron en 2010. Aunque no se ha divulgado el monto, según fuentes del CI y del MEF, “el tope” del subsidio rondaría los 20 millones de dólares anuales. La cifra manejada no sería satisfactoria para los intendentes, ya que, por ejemplo, sólo Montevideo asegura que pierde 24 millones de dólares anuales por vehículos empadronados en otros departamentos.

Los intendentes del Partido en principio Nacional (PN) dieron el visto bueno a la propuesta, aunque falta que el Ejecutivo se reúna con los intendentes de Lavalleja, Flores y Paysandú. “Casi todos estamos para apoyar”, explicó el intendente de Río Negro, Omar Lafluf. Desde el Partido Colorado, el intendente de Rivera, Marne Osorio tuvo ayer su encuentro con Presidencia, y consideró que en función de los titulares que tuvo en el encuentro “parece una buena propuesta”. Osorio asumió como vicepresidente del CI en representación del PC, y el intendente de Colonia, Waler Zimmer, como vicepresidente por el PN.