Décadas atrás era inimaginable ver el Paraninfo de la Universidad de la República (Udelar) lleno de oficiales de las Fuerzas Armadas y la Policía, pero ésa era la imagen que uno podía ver ayer cuando entraba a ese lugar. El rector de la Udelar, Rodrigo Arocena, reconoció que se trató de un momento con alto simbolismo, y que eso "da buenos augurios" de posibles coordinaciones futuras. Lo dijo al inaugurar el seminario "La educación policial y militar", convocado por la comisión creada por la nueva Ley de Educación, que tiene a cargo el rediseño integral de esta enseñanza específica para elaborar un proyecto de ley.

El objetivo de esta actividad fue dar a conocer entre la oficialidad local los cometidos de esta comisión, promover el intercambio entre los distintos actores involucrados y escuchar invitados del exterior, que contaron cómo se regula y estructura la educación de policías y militares en sus países. "Es un honor estar en esta casa, cuna de la sabiduría", dijo el coronel del Ejército José González, quien saludó a las autoridades presentes que representaron las distintas instituciones de la comisión de rediseño. Agregó que su preocupación es la educación permanente, integrada por diferentes aspectos entre los que nombró a los derechos humanos, que "deben ser respetados y reconocidos". Luego destacó la "trascendencia ciudadana de este seminario" que va a rediseñar un modelo "que será subsidiario al concepto general de enseñanza general".

El director de Formación del Ministerio de Defensa, Hernán Planchón, dijo a la diaria que la Udelar, como otras instituciones educativas públicas, tiene un papel importante que jugar en la formación de militares "constitucionalistas, republicanos y demócratas".

También recordó que organismos como la Udelar tienen un gran potencial al momento de brindarle formación a policías y militares en las líneas transversales incluidas en el Sistema Nacional de Educación, como la educación física, la educación para la salud y el trabajo, en derechos humanos, ambiental "para el desarrollo humano sostenible", artística, científica y lingüística.

Paseo regional

En la actividad de ayer también hubo dos mesas redondas con invitados extranjeros. Sobre la experiencia de la formación militar en Argentina expuso la antropóloga Sabina Frederic, subsecretaria de Formación del Ministerio de Defensa del vecino país. Frederic contó la reestructura llevada a cabo en la formación militar luego de entrar en vigencia la Ley de Educación Superior a principios de los 90. En Argentina existe la Escuela de Defensa Nacional, que es para civiles, y tres institutos terciarios para militares, desarrollados por cada una de las armas (Ejército, Marina y Fuerza Aérea). Los oficiales que quieren continuar ascendiendo deben tener un título universitario. Estos institutos dependen de un organismo que controla a todas las universidades y que depende del Ministerio de Educación. La reestructura que se realizó en Argentina llevó por lo menos 10 años. Según Frederic, costó bastante hacer comprender que “los contextos actuales no son los de la Guerra Fría, son diferentes”. Posteriormente expuso el agregado militar británico Mike Page, que contó que en su país el 90% de los oficiales son reclutados entre los egresados de las universidades “civiles”, que luego de titularse abrazan la carrera militar y reciben la formación específica. Sin embargo, tras detectar un deficit en la educación secundaria técnica, el gobierno británico estableció una escuela secundaria superior militar (Welbeck), que forma futuros técnicos en diversas áreas de defensa.

Si bien todavía no se habló del futuro de las instituciones militares y policiales actuales, extraoficialmente toma fuerza la posibilidad de eliminar el liceo militar y a su edificio de la calle Cno. Castro, que se trasladaría a la Escuela Militar que actualmente funciona en Toledo.