El proyecto de de ley que esta madrugada se encaminaba hacia la media sanción crea como un ente autónomo la Utec, que tendrá sede en el interior del país y estará conformada por diversos institutos tecnológicos regionales, especializados por áreas productivas. Desde la semana pasada la diferencia entre el oficialismo y la oposición estaba en el artículo 14 del proyecto de ley. Mientras que el Frente Amplio (FA) promovía que su Consejo Directivo Central (CDC) estuviera integrado por un rector electo por docentes, estudiantes y egresados -dos representantes de los docentes y dos de los estudiantes, uno de los trabajadores y uno de los empresarios, designados por las organizaciones más representativas-, y por los directores de los institutos tecnológicos regionales, la oposición apuntaba a un CDC con tres representantes designados por el Poder Ejecutivo, con venia del Senado -uno de ellos sería rector-, un miembro electo por el orden estudiantil y otro por el docente y los directores de los institutos regionales. En este último caso, los miembros del Ejecutivo tendrían mayoría.

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Ayer, antes de comenzar la sesión, diputados del MPP plantearon en la reunión de coordinación de bancada del FA la posibilidad de promover un plebiscito para reformar la Constitución y crear la Utec y la Universidad de la Educación como organismos autónomos y cogobernados. La propuesta surgió de la Dirección Nacional del MPP, que se reunió el lunes de noche y resolvió, previendo un revés parlamentario, crear una comisión para promover en la fuerza política la alternativa.

En la reunión de la bancada del FA los legisladores de otros sectores no opinaron. A título personal, el diputado José Carlos Mahía (Asamblea Uruguay) consideró que era un camino “inconveniente”. “Ya pasamos por la experiencia de tener una elección nacional y dos plebiscitos, de eso aprendimos, tenemos que avanzar en materia de gestión, llevar hasta los límites que la Constitución permita la formación terciaria al interior del país. Otro camino sólo conduce a enredar algo que ya viene mal parido”, dijo Mahía.

A las 16.00, cuando estaba por comenzar la sesión de la cámara baja, todo indicaba que el proyecto fracasaría, ya que sólo el FA se disponía a votarlo y no se alcanzaba la mayoría especial de 66 votos necesaria. Pero tras dos cuartos intermedios pedidos por la bancada nacionalista, de una hora y media, la situación cambió. Luego del informe del diputado Roque Arregui (Partido Socialista), que acusó a la oposición de ir contra la descentralización al no apoyar el proyecto, Rodolfo Caram (Unidad Nacional) anunció que la mayoría de los diputados blancos acompañaría el proyecto y se alcanzaría la mayoría especial. Consideró que se podría haber acordado “un mejor proyecto del que presentamos”, pero valoró que “hay camino para recorrer: tenemos la sensación de que en el Senado podemos mejorar algunas cosas”. Aseguró que la diferencia respecto del cogobierno es “bien importante” y “no está mal que se discuta”, pero evaluó que pese a esta discrepancia “hay un criterio común”. Otro blanco que anunció su voto positivo fue Carmelo Vidalín: “¿Cómo no vamos a votar este proyecto si les estamos dando la oportunidad a aquellos ciudadanos que se consideran de segunda y tercera clase por no tener las mismas oportunidades que los de Montevideo?”.

Según el senador Eber da Rosa, que participó en las negociaciones y llegó a plantear el tema a José Mujica, en la bancada del PN había diferentes posiciones sobre “cómo plantarse frente al tema”. “Hay quienes hacen hincapié en que no se logró la modificación en cuanto al cogobierno, y como no se logró, dicen ‘no votemos’. Otros sostienen que a pesar de todo hay que tratar de sacarlo adelante, porque el proyecto vale la pena en cuanto al desarrollo de la educación en el interior y a que el pronunciamiento de Diputados no es algo definitivo, porque siempre queda la posibilidad de negociación en el Senado”.

Tras el anuncio de Caram, el Partido Colorado (PC) pidió un nuevo cuarto intermedio, en el que los legisladores resolvieron mantener su posición previa y votar en contra del proyecto; sólo el diputado suplente por Rivera Ruben Núñez (de Propuesta Batllista) votó a favor; pero José Amy, de Vamos Uruguay, manifestó la postura mayoritaria del PC, en contra del “modelo de cogestión”, que a su entender fracasó en la Universidad de la República (Udelar) y en la Administración de los Servicios de Salud del Estado. “No nos oponemos de manera caprichosa. Creemos que un organismo que tiene por objetivo empezar una nueva etapa tiene que nacer sano”, explicó, y pidió que “se respete a aquellos que estamos de acuerdo con la descentralización universitaria pero no con esta forma de cogobierno”. Amy también cuestionó el cambio de opinión de la mayoría de los nacionalistas: “Esto nuevamente los pega al gobierno”, afirmó.

Sebastián Sabini (MPP) rebatió las críticas hacia la Udelar: “No era el cogobierno lo que hacía que la universidad no pudiera crecer en el interior, era la falta de recursos”, afirmó, y defendió la integración propuesta para el CDC de la Utec, con representantes del sector productivo.