Ayer a las 14.40, José López Mazz, jefe del Grupo de Investigación en Antropología Forense (GIAF), se comunicó con integrantes de la Comisión de Seguimiento de la Comisión para la Paz. Pocos minutos después sonó el teléfono del secretario de Presidencia, Alberto Breccia, que de inmediato se comunicó con el ministro de Defensa, Eleuterio Fernández Huidobro. Luego la información les llegó al comandante en jefe del Ejército, Pedro Aguerre, y a los militares que están al frente del Batallón de Infantería Paracaidistas Nº 14, en las afueras de Toledo, y donde el GIAF trabaja desde 2005. En esos minutos, se enteraron de una misma noticia, relacionada a episodios ocurridos hace más de 30 años: el equipo de profesionales de la Universidad había encontrado otro cuerpo, seguramente de una persona detenida y desaparecida durante la dictadura.

Breccia confirmaría luego que los restos estaban apenas a 20 metros del lugar en el que fueron hallados, el 21 de octubre, los del maestro Julio Castro, identificados en forma definitiva el 1º de diciembre. El secretario de Presidencia agregó que por el momento era imposible determinar el sexo o la edad, y confirmó que hoy de mañana el presidente José Mujica concurrirá al lugar. López Mazz también apeló a la cautela: “No podemos manejar el sexo por las dimensiones de las piezas óseas, hay mujeres grandes y hombres pequeños”.

El juez de la causa por la 
desaparición de María Claudia García de Gelman, Pedro Salazar, y el fiscal de 4º Turno, Ariel Cancela, tampoco quisieron aventurar hipótesis. “No estamos en condiciones de determinar nada”, respondieron. Apenas confirmaron que se trataría de un enterramiento primario -o sea que no había sido desenterrado antes-, que se halló cal y alguna prenda, y que se habría levantado con la pala retroexcavadora parte de los restos. Es el cuarto hallazgo de este tipo desde que comenzaron las excavaciones, en 2005: además de Castro, antes habían sido encontrados Fernando Miranda y Ubagesner Chávez Sosa.

La noticia coincide con un contexto muy significativo. Ayer Breccia se reunió con los partidos de oposición para mostrarles la declaración que hará Mujica en el acto del 21, en el que el Estado asumirá la responsabilidad por la desaparición de García de Gelman y de su hija Macarena. Los dirigentes del Partido Independiente consideraron que el documento “es preciso, claro y bien acotado”, pero blancos y colorados presentaron reparos. Martha Montaner, secretaria general del PC, pidió no agregar “elementos que reabran polémicas del pasado”, en particular, la Ley de Caducidad. Según explicó, el texto menciona que la remoción de la ley permitió que continuara la investigación en el caso Gelman, “lo que no es así, porque se siguió investigando”, agregó. El tema será discutido el lunes junto a los legisladores en el Comité Ejecutivo Nacional del PC, y se resolverá si concurrirán o no al acto. El senador Francisco Gallinal también discrepó con el discurso, aunque aclaró que no fue a “corregirlo” porque “toda la responsabilidad del acto corre por cuenta del Ejecutivo”. Para Gallinal, la mayor discrepancia es que el Estado “no es responsable de los hechos de la dictadura, en todo caso somos víctimas. El responsable es el gobierno, que usurpó el poder y cometió las barbaridades que cometieron”.