El edificio en el que funciona el MAPI fue construido a fines del siglo XIX por el doctor Emilio Reus. Fue diseñado como un establecimiento médico hidrotermoterápico, pero nunca llegó a funcionar como tal y en cambio albergó las sedes del Ministerio de Fomento y luego, hasta 1985, del Ministerio de Defensa Nacional (MDN).
Luego del fin de la dictadura y hasta los primeros años del siglo XXI, el edificio estuvo inhabilitado. A partir de entonces se inician las tareas de reparación y en 2004 se inaugura el MAPI. Actualmente se realizan trabajos de remodelación en el sótano, y fue en ese marco que en el mediodía del miércoles un operario encontró en el ducto del ascensor, entre la planta baja y el primer piso, un espacio de pocos metros cuadrados escondido tras una pared de madera, donde se apilaban en estantes documentos, algunos en paquetes cerrados ordenados por departamento y otros desperdigados en el piso.
El director del MAPI, Facundo de Almeida, explicó ayer a la prensa que ni bien se enteró del hallazgo lo comunicó a la Intendencia de Montevideo, organismo del que depende el museo, y que ésta se puso en contacto con la Secretaría de Seguimiento de la Comisión para la Paz. El museo nunca había utilizado ese ascensor.
El historiador Álvaro Rico, integrante de la secretaría, explicó que los documentos hallados consisten mayormente en fichas personales de militares, varias de ellas de enrolamiento al Ejército, donde constan datos como región militar en la que se enrolaron, color de ojos, instrucción, habilidades en equitación y condiciones sanitarias. Las fichas no son los únicos documentos hallados, ya que puede verse en las imágenes que tomó el museo -la prensa no pudo acceder al lugar ayer- que además de las fichas, que son de cartón, hay papeles enrollados.
“Nos llama fundamentalmente la atención, más allá del contenido, el lugar secreto donde están guardados. Es un sitio especialmente acondicionado para ocultar allí esta documentación”, señaló Rico, y recordó que en ese espacio nunca existió una parada del ascensor.
Hoy los documentos serían trasladados a la Secretaría de Seguimiento. Hasta ayer no estaba prevista una custodia especial para el edificio del museo. Algunos archivos vinculados a la dictadura que estaban en el MDN fueron procesados cuando Azucena Berrutti encabezó la cartera, entre 2005 y 2007. Cuando asumió José Bayardi, en 2008, se continuó con el procesamiento y en 2009 se entregaron al Archivo General de la Nación. Bayardi aclaró a la diaria que ese material está vinculado al seguimiento de personas durante la dictadura, pero no se cuenta con archivos con datos personales de militares.
El hallazgo abre la posibilidad de que pueda encontrarse otro tipo de documentos en el edificio. En particular en el sótano, donde algunos testimonios señalan que existió una cárcel clandestina durante la dictadura, y hay puertas tapiadas que se demolerán. También se afirma que en una de sus habitaciones se decidió el golpe de Estado de 1973, y que allí existió un búnker de la cúpula militar. “Eso no ha sido investigado históricamente, no tenemos una historia de este edificio”, explicó Rico. De Almeida, en tanto, señaló que quedan espacios sin restaurar y que no están habilitados al público. “Una sala fue el despacho del ministro y está en el mismo estado que cuando el lugar dejó de ser una dependencia del MDN”, afirmó.