-En un momento se habló mucho de que existían dos equipos económicos paralelos en el Ejecutivo. Algunos actores del gobierno han hecho hincapié en que la política económica la define el presidente. ¿Es así?

-Acá están trabajando en diferentes niveles varios actores en política económica. Tal vez en el período pasado estuvo todo más monopolizado por el MEF. Por las propias necesidades y definiciones que nos hemos dado para este período, hoy esos otros actores tienen una preponderancia mayor. Por ejemplo, el Ministerio de Industria [Energía y Minería, MIEM], que indudablemente hoy es un actor de la política económica. Está trabajando hacia la industrialización de ciertos sectores del país. El sector agropecuario fue fundamental en la salida de la crisis de 2002 y después, en el segundo impulso, para nosotros es importante avanzar en otras etapas de la actividad económica. Me parece que el ministro [Roberto] Kreimerman y la Dirección de Industrias están haciendo un buen trabajo. El otro actor es sin duda la Oficina de Planeamiento y Presupuesto [OPP], que se comenzó a desligar de algunos temas que de pronto no tuvo más remedio que asumir: la reforma del Estado, las cuestiones del funcionariado público, la negociación colectiva. Estuvo en mucha materia en la cual, a mi juicio, la OPP no se debería haber comprometido tanto, sino que se tendría que haber centrado en estar en la planificación más de mediano y largo plazo; me parece que eso es lo que están intentando hacer [Gabriel] Frugoni y [Jerónimo] Rocca y es lo que los diferencia de lo que hace el MEF. El MEF fundamentalmente trabaja en la política de corto plazo, trabaja muy controladamente sobre el sistema financiero, la estabilidad, la confianza. A veces esto lo lleva, en los cuidados financieros y de cuestiones de inflación y de presupuesto, a intervenir en todas las áreas en las cuales pueda haber iniciativas que comprometan las metas en ese aspecto. Pero me parece que hoy tenemos por lo menos esos tres actores, mientras que antes estaba más centrado exclusivamente en el MEF.

-¿Qué papel juega el asesor de Presidencia Pedro Buonomo?

-Buonomo tuvo una participación interesante en esta visión más cercana a lo que estamos definiendo para la OPP, pero estaba en el MEF. Me parece que estaba en el ministerio equivocado, porque su visión siempre fue de más largo plazo. Por eso se vinculó mucho con el proyecto de los PPP (contratos de participación público-privada) y hoy anda en algunas áreas que tienen que ver con esa orientación, por ejemplo, en el tema Fondes [Fondo para el Desarrollo].

Proyectos, gestiones y políticas

*Plan Juntos. Yo no tengo una evaluación cerrada del Plan Juntos, pero me parece que no ha dado todo el potencial que podría dar. Al principio hubo un entusiasmo y una acción voluntaria interesantes. Hubo compañeros que trabajaron y siguen trabajando mucho en ello, pero tal vez eso no se ha podido amplificar. Ahora, con una ley y un presupuesto definidos, me parece que va a empezar a dar mejores resultados.

*Tabaré Aguerre. Su gestión ha sido menos proactiva que la anterior. Últimamente el Ministerio de Ganadería no ha tenido la visibilidad que tenía antes, de eso no hay duda. Me parece que la gestión de Aguerre ha sido importante en definir algunas áreas de trabajo con respecto a la respuesta frente a las señales de la demanda más fuerte. De pronto algunas líneas del área rural no han seguido con el mismo empuje que tenían antes.

*Política cambiaria. Creo que el país ha llegado a unos niveles inflacionarios relativamente estables y bajos con respecto a su historia, y se podría hacer un esfuerzo mayor hacia la competitividad. Esto quiere decir, por ejemplo, que las tasas de interés del Banco Central no sean tan altas. Si vienen capitales a Uruguay, como parece que está sucediendo, pueden ser otra variable importante que afecte más el tema del dólar, entonces sí tal vez haya que trabajar sobre un control de la entrada de capitales. Se puede hacer por la vía de impuestos pero también por la vía de los plazos en los cuales se tienen que mantener esos capitales dentro del país, para quitarles el sesgo especulativo que puedan tener.

-¿Qué piensa de lo que dijo Marenales respecto a que está gobernando Astori?

-Creo que el MEF se ha circunscripto mucho más en este período a esa política de la que hablaba, y han aparecido otros actores que, impulsando desde nuevas áreas, le han dado algunos nortes diferentes a la política económica.

-O sea que no está de acuerdo con el planteo de Marenales.

-No, la verdad que no.

-¿Por qué le parece que Marenales salió a decir eso?

-No sé, me parece que tiene una percepción de que la política económica que más se ve es la que proviene del MEF, y eso es cierto. Si nosotros vamos a ver la visibilidad que tiene el MEF y el propio Astori en el planteo de las políticas que se llevan adelante, sin ninguna duda es mucho mayor que la de un Kreimerman, un Sebastián Torres [director nacional de Industrias], un Frugoni, etcétera. La visibilidad es mayor, pero creo que se están haciendo muchas cosas por otro lado.

-En materia de política económica, ¿cuáles han sido los diferenciales del gobierno de José Mujica con respecto a la administración de Tabaré Vázquez?

-Es indudable que tiene que tener una base de sustentación en la continuidad de los cambios que se vino haciendo, pero hay puntos importantes que se tuvieron en cuenta, no para dar un giro, pero sí para poner algunos puntos más importantes. Por ejemplo, el aspecto infraestructural es uno de los temas que este gobierno encaminó. El tema de la energía y también un posicionamiento diferente en el ámbito regional, sobre todo con nuestros vecinos. Encaramos un presupuesto con una fuerte incidencia en las inversiones. La continuidad de las políticas sociales determinó también un límite a la capacidad de inversión del gobierno, pero esa continuidad es indispensable.

-Respecto a la infraestructura, ¿qué efectos ha tenido la ley de PPP?

-Yo creo que todavía no ha arrancado eso. Tenemos algunas dificultades para poner en funcionamiento proyectos que son importantes. Nos ha pasado con el Plan Juntos, con el Fondes, que por suerte ahora está empezando. Y el proyecto de PPP era un elemento vital para incluir una parte del ahorro nacional que no está participando en los proyectos productivos y de inversión porque se iban a presionar el endeudamiento público.

-¿Por qué está costando la implementación de los PPP?

-En primer lugar, porque tiene una reglamentación bastante complicada por todos los reaseguros que se necesita reglamentar para que el aporte privado cumpla efectivamente, algo que se está elaborando. En segundo lugar, porque tienen que estar los proyectos. Si uno mira las iniciativas de los distintos ministerios, el que tiene más organizado esto es el de Transporte y Obras Públicas. Hay también alguna propuesta del Ministerio de Vivienda y del Interior, pero es necesario que los proyectos estén diseñados.

-Se pensó que los PPP podían ser un mecanismo para financiar la reforma ferroviaria.

-Ése era uno de los temas para los cuales este mecanismo estaba previsto y se atrasó, sin ninguna duda. Ha habido cambios en la dirección de la Administración de Ferrocarriles del Estado [AFE], y además, para que el proyecto arranque, tiene que arrancar la nueva institucionalidad de AFE y la Corporación Nacional para el Desarrollo [CND], de tal manera que estén las herramientas para constituir esos proyectos. En eso estamos un poco atrasados.

-Más allá de los cambios que ya se manejan para el sistema tributario, ¿deberían establecerse otros antes de que termine este período de gobierno?

-A veces me resisto un poco a pensar que casi todas las soluciones derivan en la cuestión tributaria. A mí me parece mejor dar subsidios directos que pensar tanto en el sistema impositivo. En cuanto al sistema, en este período o el próximo podría hacerse un esfuerzo adicional sobre el IVA. Con respecto al IRPF, el avance se ha hecho exclusivamente sobre las rentas de trabajo. Creo que puede quedar margen para hacer que la equidad contemple también a las rentas de capital.