El directivo de Tenfield Nelson Tano Gutiérrez aclaró ante la jueza civil de tercer turno, Claudia Kelland, que sus afirmaciones publicadas el 16 de mayo de 2011 en Ovación no eran “ninguna ofensa personal” al entonces ministro de Turismo y Deporte Héctor Lescano ni pretendieron atacar su “honorabilidad” ni su “moral”. Aseguró que sus palabras estaban referidas a su gestión.

Luego de que Lescano hiciera declaraciones a favor de que la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF) controlara los derechos de televisación de los partidos de la selección uruguaya, Gutiérrez manifestó en esa entrevista que “no está claro lo que propone ni a quién defiende Lescano” y que “no es nada nueva esta persecución contra Tenfield por parte del señor Lescano y de muy poderosos intereses económicos privados”. También aseguró que el entonces jerarca “ha despilfarrado, sin ton ni son, los cuantiosos fondos que recibió en volumen histórico demostrando el daño que manos inexpertas le pueden ocasionar al Estado”.

Entonces Lescano consideró “graves” las declaraciones del ex futbolista y exigió que se retractara advirtiendo que iniciaría acciones legales si no lo hacía, extremo que concretó ante la Justicia civil el 18 de octubre de 2011. El escrito solicitaba que Gutiérrez aclarara sus dichos o presentara pruebas. La defensa consideró que había irregularidades en el procedimiento que estaba siguiendo la magistrada y presentó un recurso de inconstitucionalidad ante la Suprema Corte de Justicia (SCJ). En marzo, la SCJ rechazó la acción y el martes pudo concretarse la primera y única audiencia, que se prolongó por más de tres horas, según dijo a la diaria el abogado de Lescano, Marcelo Schelotto.

Ante la jueza, Gutiérrez admitió sus dichos pero aseguró que no los dijo “con la interpretación” que le dio el ahora ex ministro. “La nota refiere a una gestión en aquel momento del ministro Lescano únicamente con respecto a su gestión. Mi opinión había sido en aquel momento crítica y negativa sobre la misma. De más está decir que surge de esa propia edición que no hay ninguna ofensa personal ni en su honorabilidad, ni en su moral, sino simplemente relacionado a su gestión. Hay una impronta personal del periodista [José Mastandrea] en la nota. Ése es mi sentir y expresar. La nota contiene lo que en aquel momento yo expresé pura y llanamente sobre su gestión”, dijo el empresario según consta en la sentencia a la que accedió la diaria.

El dictamen concluye que Lescano y Gutiérrez “dan por superado este diferendo” y que este último dejó sin efecto el resto de las acciones legales interpuestas ante la magistrada que seguían su curso sin frenar el juicio. Schelotto afirmó que Lescano “quedó conforme”. “Entendió que el resultado era lo que buscaba: quedó claro que Gutiérrez hablaba de la gestión, y la gestión al ser pública es criticable. Como Lescano no perseguía un fin económico ni ningún otro resarcimiento entendió que la demanda ya había cumplido”, señaló el profesional.