El presidente del Consejo Directivo Central (Codicen) de la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP), José Seoane, y la consejera de ese organismo Nora Castro presentaron renuncia a sus cargos la semana pasada, tras conocer la decisión del presidente José Mujica de removerlos. Mujica fundamentó el cambio en la necesidad de profundizar la descentralización de la ANEP y disminuir el poder del Codicen.
El Codicen será presidido por Wilson Netto, quien se desempeña desde 2005 como director general del Consejo de Educación Técnico Profesional (CETP, ex UTU), mientras que el otro consejero designado del Poder Ejecutivo en ese organismo, Javier Landoni, será el sustituto de Castro. Mujica enviará esta semana las venias de las nuevas autoridades al Parlamento.
El ministro de Educación y Cultura, Ricardo Ehrlich, explicó que con estos cambios se “fortalecerá la educación técnica” y se hará un “esfuerzo mayor por impulsar la descentralización” de los subsistemas de la ANEP (CETP, Consejo de Educación Inicial y Primaria [CEIP], Consejo de Educación Secundaria y Consejo de Formación en Educación).
En el Partido Socialista (PS) y en Asamblea Uruguay (AU) no objetan las nuevas designaciones en la cúpula del Codicen pero enfatizan que lo importante “no son los nombres sino el proyecto”. “En realidad lo que se precisa son cambios estructurales, y ojalá Netto y los próximos directores logren encaminarlos”, indicó el diputado José Carlos Mahía (AU). El diputado Roque Arregui (PS) evaluó que los cambios de autoridades son un tema “menor” y que “lo sustancial es el proyecto educativo”.
La senadora Lucía Topolansky (Movimiento de Participación Popular) hizo referencia el viernes a la necesidad de una mayor autonomía de los órganos desconcentrados respecto del Codicen, al referirse a los cambios en las autoridades del organismo. “Organismos como Primaria, Secundaria y UTU pueden ganar en descentralización y autonomía a partir de cabezas que tienen una visión más global, más nacional de la cosa. Esto permite cumplir a cabalidad la Ley de Educación, en el sentido de que los centros tengan su marco de autonomía y de decisión, con una coordinación”, manifestó Topolansky.
El PS entiende que puede concretarse una mayor autonomía de los desconcentrados mediante un reglamento del Codicen que delegue competencias que hoy tiene ese organismo. Esto, puntualizó Arregui, está amparado en el artículo 61 de la Ley General de Educación, que dispone que el Codicen puede delegar en los órganos, “por resolución fundada, las atribuciones que estime convenientes”. “Hay muchos aspectos que son relativamente secundarios, que el Codicen hoy resuelve y que son instancias burocráticas, y no le dejan el tiempo libre para pensar y resolver los temas de fondo”, estimó Arregui. Puso como ejemplo la aprobación de convenios. “Si hoy la UTU quiere hacer convenios con empresas públicas o privadas, eso debe pasar por el Codicen”, indicó. Argumentos similares utilizó Topolanksy el viernes. “El Codicen provoca un efecto embudo donde el CEIP, por ejemplo, se ve condicionado en tiempos, en resoluciones, porque todo cae en esa misma olla de tres ramas que son complejas. Eso enlentece muchísimo los procesos”, opinó.
En cambio, Mahía consideró que “la clave es la mejora de la gestión” y evitó pronunciarse sobre la propuesta de mayor autonomía de los desconcentrados. “Hay que estudiarlo específicamente, no es una cuestión sólo de deseo”, apuntó.
Manos libres
Por su parte, Mujica explicó que luego de la interpelación del senador nacionalista Jorge Larrañaga (Alianza Nacional) a Ehrlich se sentía “con las manos libres” para llevar a cabo los cambios que creía necesarios en la educación. De hecho, Netto, además de provenir de la educación técnica, fue el único director de un consejo de ANEP que dio, ante la Comisión de Educación del Senado, una decidida opinión favorable acerca del proyecto de ley del Poder Ejecutivo que convierte a UTU en un nuevo ente autónomo.
Según publicó el diario La República ayer, el nuevo director general del CETP será el ingeniero agrónomo Eduardo Davyt, director del programa Educación para el Agro de UTU, mientras que la sustituta de Landoni será Rita Ferrari, directora del Programa de Planeamiento Educativo. Según el matutino, estos nombres fueron impulsados por el propio Netto para asegurar la continuidad de la gestión.
Fuentes de UTU señalaron que Ferrari está trabajando con Netto desde que éste asumió en el CETP y es “la mano derecha” del jerarca, con una reconocida trayectoria en la planificación y gestión de “todo el funcionamiento” de la UTU, así como con un “buen relacionamiento con los sindicatos”. Sin embargo, la designación de Davyt como director general se aprecia “como una señal de la voluntad del presidente Mujica” de darle importancia dentro de la UTU al área agraria.