Hoy, en un seminario al que concurrirán el presidente José Mujica y autoridades de la Oficina de Planeamiento y Presupuesto (OPP), el Poder Ejecutivo adelantará cuáles son las principales ideas que ha manejado para la implementación de políticas de población en Uruguay.

Uno de los insumos con los que cuenta el gobierno es un documento elaborado por la Comisión Sectorial de Población, que ha funcionado desde agosto de 2010 en la órbita de la OPP y que integran técnicos de los ministerios del Gabinete Social.

En ese material, que ya fue analizado por el Consejo de Ministros, se recomienda la implementación de una serie de políticas públicas vinculadas a la migración interna y a la distribución territorial de la 
población, la natalidad y la fecundidad, y las alternativas para la promoción de la migración internacional.

En cuanto a este último punto se propone la aplicación de políticas tendientes a generar un “clima favorable en la sociedad uruguaya” para la recepción de inmigrantes de distintas partes del mundo, de manera tal que se eviten posibles “brotes de racismo, explotación, xenofobia, discriminación y formas conexas de intolerancia”.

Se sugiere además que los organismos competentes ejecuten una “campaña de sensibilización y valoración sobre lo que significa recibir inmigrantes”, con énfasis en la diversidad como un “factor de enriquecimiento cultural y de fomento al desarrollo humano de una sociedad”.

En el apartado sobre fecundidad y natalidad, se plantea una equiparación de las licencias por maternidad y paternidad entre el sector público y el privado -una iniciativa a discusión en el seno del Poder Ejecutivo que todavía no ha alcanzado consenso-, la flexibilización del medio horario en los trabajos más allá de lo establecido por lactancia y la integración del servicio doméstico como un actor relevante en el marco del fortalecimiento del Sistema Nacional de Cuidados.

Además, se propone universalizar la cobertura de las policlínicas de fertilidad asistida a todas las personas del Sistema Nacional Integrado de Salud (SNIS), continuar con la educación sexual y reproductiva de niños y jóvenes en la enseñanza formal, investigar sobre las motivaciones de los sectores de población más pobres con patrones culturales que promueven el embarazo adolescente y fortalecer una matriz de protección de las políticas para socializar el cuidado de los niños.

La Comisión Sectorial de Población de la OPP elaboró las propuestas a partir de los nuevos datos censales. El Censo, finalizado este año, permitió constatar que en Uruguay el ritmo de crecimiento poblacional es muy bajo, que el envejecimiento de la estructura de edades se ha acentuado y que hay un incremento en el grado de urbanización. También observaron que se ha fortalecido el proceso de metropolización y concentración de la población en la franja costera, que la estructura de arreglos familiares se aleja cada vez más del modelo tradicional y que existe una mayor demanda de soluciones habitacionales producto del cambio de la estructura de hogares.

Esta dinámica demográfica, aseguran desde la comisión, provocará un aumento de la presión sobre el sistema de jubilaciones y pensiones, un incremento del costo de mantenimiento del SNIS y la necesidad de implementar un mecanismo de cuidados para los adultos mayores no autoválidos. Además, advierten en el documento representantes de varios ministerios, se establecen presiones y amenazas sobre los recursos naturales y ecosistemas costeros y se incrementa el gasto público debido a una distribución territorial desordenada.