El verano se siente en las convocatorias a reuniones en la actividad política, a excepción de aquellas que se realizan en balnearios, con asados de por medio. Ayer, a raíz de un pedido de la Asociación de Radios del Interior (Rami), la Dirección Nacional de Telecomunicaciones (Dinatel) convocó a una reunión del CHAI que no tuvo quórum. Sólo asistieron Luis Ferrari en representación de la Dinatel; el director de la Licenciatura en Ciencias de la Comunicación, Gabriel Kaplún; y Juan Brañas, directivo de Rami, que representa a 140 emisoras. Estuvieron ausentes los representantes del Ministerio de Educación y Cultura, de las universidades privadas, de la Asociación de la Prensa Uruguaya (APU), de Andebu y de la Cámara Uruguaya de Televisión para Abonados (CUTA), entre otros.
Mutis por el FA
Las autoridades del Frente Amplio (FA) se excusaron de emitir opinión sobre el decreto, ya que aún no lo han leído. "No lo leí, me llegaron mensajes, pero no me metí en este tema", explicó la presidenta del FA, Mónica Xavier. Acotó que no está prevista "una discusión puntual del decreto", si bien está en agenda "la temática general" relativa a los medios de comunicación. Los vicepresidentes de la coalición de izquierda Juan Castillo e Ivonne Passada tampoco conocían los contenidos de la norma.
De todos modos, tanto Brañas como Kaplún le transmitieron informalmente al representante gubernamental su malestar con el decreto del 31 de diciembre, que excluye a los actuales operadores comerciales de televisión abierta de requisitos tales como la comparecencia ante una audiencia pública, la presentación de un plan comunicacional y la acreditación de solvencia económica y moral. Se los excluye además de la obligación de someter su proyecto a la evaluación del CHAI, aspecto que sí deberán cumplir los aspirantes a nuevos operadores. Brañas y Kaplún entienden que esto último "deteriora" el rol del CHAI.
Brañas se mostró preocupado por las exoneraciones a los actuales operadores, que implican un cambio en las condiciones acordadas en el CHAI y dispuestas por el primer decreto en la materia, emitido en mayo del año pasado. El director de Rami hizo notar que esos beneficios no se otorgan, al menos por ahora, a los actuales operadores del interior del país. De todos modos, se mostró contrario a otorgar cualquier tipo de preferencia. "No me parece bien, hay cosas que hay que revisar. Hay que saber quiénes son los que están operando en el interior. Hay muchos canales alquilados, que no los están operando los titulares, y hay muchos monopolios que no deben continuar", advirtió.
Tanto Brañas como Kaplún coincidieron en que el decreto del 31 de diciembre "desmotiva" a los aspirantes a nuevos operadores a presentarse al llamado. "El contenido sustantivo favorece a los tres grandes y los exonera de requisitos, y es un desestímulo para los nuevos canales porque no se someten a las mismas reglas", evaluó Kaplún.
El académico manifestó su malestar personal por el momento en el que se emitió el decreto, a fin de año. "Uno saca la conclusión de que está buscado para evitar reacciones", consideró. Los aspirantes a usufructuar frecuencias tienen plazo hasta el 25 de febrero para presentar sus proyectos.
Ferrari dijo en la reunión de ayer, que la Dinatel no estuvo en conocimiento del proceso que concluyó con la redacción de la norma que modificó el decreto originario sobre televisión digital. El 26 de diciembre, el titular de la Dinatel, Sergio de Cola, había asegurado a la diaria que a su dirección no le constaba que el gobierno estuviera redactando el nuevo decreto, que se emitió cinco días después. Ferrari quedó encargado de trasladar a las autoridades del Ministerio de Industria la preocupación expresada por los integrantes del CHAI que asistieron a la reunión.
La Asociación Mundial de Radios Comunitarias (Amarc) expresó el martes mediante un comunicado, que el decreto del 31 de diciembre mantiene los "privilegios" de los "históricos dueños de los medios de comunicación en Uruguay". "El cambio de tecnología en la televisión parecía ser una buena oportunidad para la democratización de las comunicaciones en el país y para modificar la grave concentración de medios que existe en poder de tres grupos económicos desde hace más de medio siglo", señala el comunicado.
El árbol y el bosque
El subsecretario de Industria Edgardo Ortuño, que participó en la redacción del decreto del 31 de diciembre, consideró que quienes critican la norma “no están valorando adecuadamente lo sustancial”: la diversificación de la oferta televisiva y el fomento al desarrollo de la producción nacional que ésta genera. “Se mantienen los principios y planteos fundamentales del decreto original, y es un equilibrio adecuado entre continuidad y cambio. Genera las condiciones para una diversificación inédita de propuestas de comunicación en el país y al mismo tiempo reconoce la trayectoria y el aporte de las propuestas de comunicación que ya tienen 50 años en Uruguay”, resaltó.
Consultado sobre las razones por las que el gobierno resolvió eximir a los actuales operadores de ser evaluados por el CHAI y presentarse a una audiencia pública, Ortuño señaló que el decreto “establece reglas de juego comunes para todos los operadores hacia adelante, y al mismo tiempo reconoce las diferencias de puntos de partida”. “No sería lógico exigir los mismos requisitos de presentación de información a quienes hace 50 años están emitiendo -cuyo proyecto de comunicación, se comparta o no su contenido, se conoce- que a quienes plantean nuevos proyectos y deben fundamentarlos a nivel comunicacional y económico”, argumentó.