Los trabajadores de las cadenas de supermercados Disco, Devoto y Géant realizarán hoy un paro de 24 horas con concentración frente a la Dirección Nacional de Trabajo (Dinatra), en apoyo a la delegación sindical que se reunirá con delegados del grupo empresarial y el gobierno para negociar una salida al conficto que mantienen desde mediados de 2012. Posteriormente, realizarán una asamblea general en el lugar para evaluar el resultado de la negociación.

Las tres cadenas pertenecen al grupo colombiano Éxito, cuyo accionista mayoritario (con 54,8% de las acciones) es el Grupo Casino, conglomerado de origen francés, complementado con fondos de pensiones y otros inversionistas menores. En Uruguay Éxito tiene 27 supermercados con la marca Disco, 24 con Devoto y uno con Géant, distribuidos en tres departamentos: Canelones, Maldonado y Montevideo. Según informa en su sitio web, el grupo emplea a unos 36.000 trabajadores entre Colombia y Uruguay, donde actualmente suman unos 7.000.

Las negociaciones entre los sindicatos y la empresa comenzaron hace seis meses, cuando se plantearon “algunos puntos sobre persecución sindical, maltrato de mandos medios, cambios de horario abusivos y falta de personal”, indicó Carlos Baiz, dirigente del Sindicato de Devoto y miembro del Consejo Directivo Nacional de la Federación Uruguaya de Empleados de Comercio y Servicio (Fuecys).

La plataforma sindical incluye además el rechazo a los horarios rotativos, a la triple sanción a las cajeras -a las que se castiga con “pérdida de presentismo y pérdida de quebranto de caja y de días de trabajo”- y el abuso de funciones de algunos mandos que “se han tomado atribuciones que no les corresponden”. Cuestionan también el régimen sancionatorio que “dice ser correctivo pero que claramente está enfocado a la pérdida de salario y empleo”, así como la obligación de los trabajadores a aceptar “cambiar horarios y hacer horas extras en las fechas especiales”, explicó Baiz.

Otro tema que se viene discutiendo es la falta de personal. “Hoy en día hay unos 200 funcionarios menos en la dotación, por lo que se recarga en las tareas a los trabajadores actuales”, agregó. Además, la cadena Devoto implementó la política de “eliminar a las empresas tercerizadas y terminó de sacar todo el personal de limpieza. Esta tarea se trasladó a los trabajadores propios, obligándolos a encargarse de la limpieza de pisos, techos, paredes, cámaras y hasta barrer las azoteas los días de lluvia”, explica Baiz. Aquellos trabajadores que se negaron a realizar esas tareas, porque no “están descriptas en las categorías acordadas por convenio”, fueron sancionados, agregó el dirigente.

Baiz explicó que por estas razones se decidió hacer paros con ocupaciones de los locales los días 22, 23 y 24 de diciembre, pero antes de efectivizar la medida, “el gerente general nos llamó para decirnos que la empresa estaba dispuesta a negociar, por lo que levantamos la convocatoria”. Pero Baiz entiende que “todo fue una tomadura de pelo” porque en una reunión bipartita realizada el 26, la empresa expresó que no va a conceder ninguna “de las reivindicaciones planteadas” por los sindicatos.

Dos días después se entabló una negociación tripartita en la Dinatra, pero los delegados de la empresa explicaron que “sólo estaban mandatados a pedir una prórroga”, agregó Baiz. En ese encuentro se acordó extender hasta hoy la negociación. Los trabajadores esperan que la situación “se destrabe definitivamente”. De lo contrario tomarán medidas más duras, anunció Baiz.

Por su parte, a partir de ayer, los supermercados comenzaron a aumentar los precios de los 200 artículos de la canasta familiar que se habían comprometido a no subir mediante un acuerdo alcanzado con el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), que entró en vigencia el 20 de octubre. Según declaraciones de Fernando Vieites, presidente de la Asociación de Supermercados, a El País digital, los productos “vuelven a ajustarse automáticamente” y esperan “la llegada de las primeras listas de precios de los proveedores con los aumentos”. Explicó que “no hubo más contactos” con el MEF para extender las rebajas y opinó que el gobierno “está yendo por otro lado para mantener la inflación bajo un control relativo”.