El ex ministro de Economía y Finanzas Álvaro García (Partido Socialista) sostuvo ayer en un encuentro con la Juventud Socialista del Uruguay (JSU) que la izquierda necesita construir un “nuevo relato” en Uruguay. “En la izquierda tuvimos grandes momentos de épica. Primero fue ‘a desalambrar’, luego ‘a redoblar’, ¿y ahora, después de diez años de gobierno, cuál es esa palabra? Nos está faltando algo. Seguimos muy parados en los viejos paradigmas, en algunos eslóganes que venimos repitiendo desde hace mucho tiempo, pero tenemos que dar el salto cualitativo”, expresó. “Podemos mejorar el país económica y socialmente, pero si no generamos desde la izquierda un nuevo relato cultural, me parece que no vamos a cambiar la historia”, agregó.

García dijo estas palabras en una actividad realizada por la JSU, en la que algunos referentes del Frente Amplio (FA) comentaron los aportes de este sector al programa de la coalición de izquierda. García destacó que el documento realizado por la JSU hiciera referencia al “esfuerzo necesario para la construcción de un nuevo relato de izquierda en Uruguay”.

El ex ministro también se refirió al problema de la educación. Advirtió que “si miramos los números” de esta área “y los niveles de secundaria que hay actualmente, Uruguay va a tener un problema grave y no sé si en demasiado tiempo”. Según dijo, las actuales cifras educativas implican que se podría “detener el proceso de crecimiento”. El ex jerarca señaló que sólo uno de cada tres estudiantes que ingresan en secundaria termina el bachillerato, y consideró que desde esta perspectiva el gasto en la Universidad de la República es regresivo, en la medida que los sectores más pobres no llegan a alcanzar sus servicios.

“Deberíamos poner cualquier presupuesto en lograr objetivos educativos, pero tenemos que tener el objetivo primero”, afirmó. Felicitó a la JSU porque en sus aportes programáticos había incluido varias metas, como “duplicar el egreso de los bachilleratos” y el “egreso universal del primer ciclo de enseñanza media en cinco años”. “En Uruguay estamos acostumbrados a no medir resultados y tenemos que medir resultados”, afirmó.

La más crítica con el documento socialista fue la asesora en Desarrollo Municipal y Participación de la Intendencia de Montevideo y vicepresidenta de la Comisión de Programa del FA, Mariella Mazzotti (Vertiente Artiguista). Si bien dijo que el documento fue “muy bueno, completo y discutido con fundamentos”, Mazzotti sostuvo que los aportes fueron “bastante benévolos con los logros de los gobiernos del FA”. Opinó que efectivamente “ha habido una drástica disminución de la pobreza y la indigencia, pero no así de la exclusión social. Esto todavía existe, y mucho, y alcanza con ir a algunas zonas de la periferia de Montevideo para darnos cuenta de que podemos estar en África. Es increíble cómo no hemos logrado llegar a esos núcleos duros de exclusión social”.

El otro orador fue el ex ministro de Turismo y Deporte y presidente de la Comisión de Programa del FA, Héctor Lescano (Alianza Progresista), quien también destacó la calidad del documento elaborado por la JSU. Al igual que Mazzotti, opinó que se debía trabajar con más profundidad el aspecto cultural: “Probablemente sea necesario desarrollarlo, no sólo por ustedes [en referencia a la JSU], sino por nosotros también”. Según dijo en “términos autocríticos”, la cultura “debería ocupar en el programa de los partidos una centralidad que hasta ahora no ha tenido”.