La propuesta de ajustes salariales que presentó el gobierno para el grupo 22 (ganadería, agricultura y actividades conexas) fue aprobada por mayoría en la reunión del Consejo de Salarios realizada el viernes. Votaron a favor los dos representantes del Poder Ejecutivo (PE) y el de la Unión Nacional de Asalariados, Trabajadores Rurales y Afines (UNATRA); y en contra, los dos negociadores de las gremiales empresariales.

En este grupo se laudaron los salarios de los trabajadores del arroz, la ganadería, los tambos y agricultura de secano. En forma retroactiva, a partir de julio de este año, el salario mínimo del peón común en el sector arrocero será de 11.000 pesos, de 13.500 a partir de julio de 2014, y de 15.400 a partir de julio de 2015. El salario mínimo de la categoría “Peón sin especialización 2” en los demás sectores será de 12.000 pesos desde julio de este año, de 14.000 desde julio de 2014, y de 15.400 a partir del 1º de julio de 2015, equiparándose a los salarios del sector arrocero.

Después de unas 20 reuniones del grupo en las que las partes no pudieron arribar a un acuerdo para la firma de un convenio, el PE presentó una propuesta. Sin embargo, el viernes, luego de una reunión de los presidentes de la Asociación Rural del Uruguay (ARU), la Federación Rural, la Asociación Cultivadores de Arroz y la Asociación Nacional de Productores de Leche, la delegación empresarial intentó volver a discutir la última “propuesta de acercamiento” a la que se había llegado. Marcelo Amaya, dirigente del Sindicato Único de Trabajadores del Arroz y Afines, que integra la UNATRA, dijo que ante este cambio de actitud se le comunicó al PE que se “veía con buenos ojos la posibilidad de llegar a un acuerdo” y que se quería “ver si la intención de negociar era verdadera”. Entonces, según Amaya, la Unatra presentó “una serie de mejoras” a la propuesta de acercamiento original, pero no consiguió “ninguna respuesta”. Como los delegados empresariales se mantuvieron firmes en la primera redacción, que ya había sido catalogada de “insuficiente a nivel salarial” por la Unatra, los representantes de los trabajadores se inclinaron finalmente por votar la propuesta del PE, algo que además había sido aprobado el jueves por las asambleas sindicales del arroz y de la ganadería. Para Amaya, sin embargo, habría sido mejor “llegar a un acuerdo”, no solamente porque la propuesta del PE “no podía contener mejoras en las condiciones de trabajo”, sino también porque acordar con los empresarios “significa que reconocen el trabajo de los peones rurales” y a sus sindicatos.

El presidente de la ARU, Ruben Echeverría, opinó que los empresarios hicieron “todo lo posible por ser flexibles”, pero no fueron escuchados. “Pensamos que luego de una negociación tan larga tendría que haber flexibilidad de todas las partes; por eso hasta el último momento intentamos negociar. [...] Pero acordamos un voto negativo, porque el laudo que otorga este decreto es muy superior a las pautas que fijó el propio PE para la negociación colectiva”, dijo. Según Echevarría, los costos del sector agropecuario siguen aumentando y es probable que esta decisión “perjudique a los trabajadores con menos condiciones”, porque los empresarios van a “tratar de evitar un número de trabajadores grande y de apostar a la capacitación, lo que irá en desmedro de los trabajadores menos capacitados”.

Para Amaya, el incremento salarial obtenido es histórico: “Es un salto muy importante, que corrige una postergación histórica de los trabajadores rurales, que son de los que más aportan al Producto Interno Bruto del país”. Respecto del proceso de negociación, expresó que fueron fundamentales el aporte brindado por el PIT-CNT, que “les dio visibilidad a los trabajadores rurales en la ciudad”, la estrategia de “negociar juntos varios sectores en el grupo madre” y las acciones desarrolladas alrededor de la Expo Prado, porque “se le pudo llegar a mucha gente que no sabía de nuestra situación, y eso generó una reacción de la patronal, que nosotros conocemos en el territorio, pero que para la gente de la ciudad fue increíble”.