El proyecto de desafiliación de las AFAP, cuya redacción está prácticamente terminada, innova respecto de lo actuado por anteriores administraciones. En los gobiernos de Jorge Batlle y de Tabaré Vázquez se fijó un período para desafiliarse de las AFAP. Pero en el proyecto de ley que presentará en breve el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social (MTSS), esa opción se vuelve permanente para quienes tengan entre 40 y 50 años. Los trabajadores que deseen desafiliarse tendrán la opción de asesorarse con el Banco de Previsión Social (BPS) para que éste haga una proyección económica y de rentabilidad de su jubilación, explicó a la diaria Ivonne Pandiani, subdirectora de Seguridad Social del MTSS.

Los menores de 40 años no tendrán la opción de desafiliarse, ya que los escasos años de trabajo hacen que el BPS no pueda hacer una proyección económica certera. Y los mayores de 50 años tendrán un año para desafiliarse a partir de la promulgación de la ley. No podrán desafiliarse los mayores de 50 años que hayan entrado “obligados” a una AFAP (por ganar más de 31.168 pesos al momento de afiliarse). “Solamente 7%” de los afiliados a las AFAP no tendrá la opción de desafiliarse, aseguró Pandiani.

No obstante, las excepciones establecidas generan reparos en las organizaciones de trabajadores activos y pasivos. Ariel Ferrari, representante de los trabajadores en el directorio del BPS, aseguró que en una reunión que mantuvieron con el FA en abril se dijo que la opción de desafiliarse se aplicaría a todos, mientras que “acá sería para determinado universo”.

Hoy habrá una reunión de la Organización Nacional de Asociaciones de Jubilados y Pensionistas del Uruguay (Onajpu), la Federación Uruguaya de Cooperativas de Vivienda por Ayuda Mutua, la Federación de Estudiantes Universitarios del Uruguay y el PIT-CNT para evaluar este tema. Se estudiará en particular si es conveniente impulsar una campaña de recolección de firmas para derogar las AFAP o si es suficiente con realizar modificaciones a este proyecto. “Acordar estas cosas es un avance hacia la reforma estructural, y prefiriríamos esto antes que un referéndum”, manifestó Ferrari.

En la reunión también se presentará un trabajo, adelantado por El País ayer, que concluye que las jubilaciones en algunas AFAP pueden bajar hasta 8% por concepto de la comisión que cobra la administradora.

Hay que conciliar

Fuentes del MTSS aseguraron que el proyecto no establece una desafiliación “universal” porque eso no obtendría consenso en la interna del FA, y el gobierno no quiere arriesgarse a que el proyecto naufrague.

El diputado frenteamplista Alfredo Asti (Asamblea Uruguay) manifestó que está de acuerdo con que “la gente pueda hacer sus cálculos y optar”. No obstante, alertó que es necesario establecer parámetros claros, y valoró que la apertura no puede ser irrestricta, ya que “para que el sistema de ahorro individual funcione, tiene que tener determinada estabilidad”. “No se puede estar poniendo todo el tiempo en juego la permanencia de los afiliados a las AFAP, y por lo tanto la continuidad de los aportes que éstas reciben”, consideró.

Otros legisladores oficialistas valoran el proyecto en una línea similar a la planteada por el PIT-CNT. El diputado socialista Roberto Conde adelantó que “no le convence” que los trabajadores puedan desafiliarse recién después de aportar “15 años” a las AFAP. “Pero bueno, a lo mejor hay un argumento, tengo que estudiarlo”, manifestó.

Además del proyecto de desafiliación de las AFAP, el MTSS presentará una iniciativa de jubilación parcial -cuyos contenidos adelantó El Observador ayer, y que consiste en cobrar media jubilación y trabajar cuatro horas- y otra que actualiza la forma de medir la incapacidad física y de establecer por consiguiente parámetros para la jubilación en estos casos.

Brenta valoró que las tres iniciativas supondrán “un cambio muy importante en este período de gobierno en materia de seguridad social, que le otorgó libertad a los ciudadanos” y establecerá un sistema “moderno”.