Dos días después del resultado electoral del domingo, era previsible que el ex presidente Tabaré Vázquez, en caso de hablar en público, se refiriera al fracaso de la iniciativa para derogar la ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE). Y lo hizo, pero también envió otros mensajes. En una cena organizada por la Coordinadora B del Frente Amplio (FA) con fines recaudatorios, en un salón en Carrasco, Vázquez llamó a “cuidar los recursos públicos” ante el inminente envío al Parlamento del proyecto de ley de Rendición de Cuentas.

El salón se llenó de dirigentes políticos de todos los sectores -entre ellos, la senadora emepepista Lucía Topolansky, el secretario general del Partido Socialista, Yerú Pardiñas, y el prosecretario de Presidencia, Diego Cánepa- y de empresarios de distintos rubros, algunos de ellos viejos conocidos en los eventos que organiza el Frente Amplio con fines recaudatorios: el presidente de CUTCSA, Juan Salgado, el dueño de Fripur, Alberto Fernández, y el gerente general de la Asociación Española, Julio Martínez. También asistieron el dueño del diario La República, Gustavo Yocca, y el presidente del sindicato de Vendedores de Diarios y Revistas, Eddie Espert.

Vázquez comenzó su exposición con una introducción en la que se refirió a la tarea de gobernar y a las políticas públicas. “Las políticas públicas ante todo son políticas, no son maniobras o técnicas de ensayo o de prueba, es hacer política. Ninguna política es casual ni neutral, tiene objetivos y fundamentos que la impulsan. El FA desarrolla políticas desde su propia identidad, desde su propia historia”, manifestó.

A continuación anunció que haría comentarios sobre las políticas en materia de economía y de seguridad, que no implicaban “desconocimiento ni condicionamiento alguno al gobierno ni a la discusión programática”. Enfatizó que el cuidado de los recursos públicos “es fundamental”, dado que ello “es imprescindible para cumplir con las políticas públicas orientadas a mejorar la distribución del ingreso y ayudar a quienes más necesitan del apoyo del Estado”. Remarcó que se debe “contar siempre con los recursos para nunca retroceder en este rol del Estado” y “lograr el máximo con cada peso aplicado”, la “eficiencia en el uso de los recursos asignados”.

Afirmó que es central el control de la inflación, ya que éste implica, “fundamentalmente para un gobierno de izquierda, el crucial cuidado del poder de compra de los trabajadores y los pasivos”. Aseguró que es necesario “fortalecer los mecanismos de integración regional, fortalecer el Mercosur y todas las instancias que lleven a una fructífera integración regional para nuestros pueblos”. En materia de seguridad ciudadana, enumeró las medidas adoptadas por los gobiernos del FA y cuestionó la propuesta de bajar la edad de imputabilidad penal.

Hizo referencia al fracaso de la iniciativa para derogar la ley de IVE. Apuntó que sobre ese tema “no todos tenemos la misma opinión” y que eso “no es un drama”. “Por el contrario, es saludable que una comunidad se interrogue a sí misma”. Aseguró que lo sucedido el domingo es el “punto final y definitivo de este episodio”. “Tras el contundente e inexcusable pronunciamiento cívico, aquí no hay buenos o malos, hay una ciudadanía convencida de que nuestro país debe ser cada día mejor”, manifestó, y fue fuertemente aplaudido por la concurrencia. Entre los aplausos se escuchó el “Bravo, Tabaré” de la ex dirigente colorada Glenda Rondán.