El semanario Búsqueda publicó ayer una entrevista con el ex presidente Tabaré Vázquez. El tema central de la conversación fue la relación de América Latina con Estados Unidos. Vázquez comenzó criticando el proteccionismo de ese país. “En una relación entre pares, Estados Unidos debería reconocer que América Latina es una región, entre otras cosas, productora de alimentos, y que todos los impedimentos que nos pone con subsidios directos e indirectos nos perjudican. Ya que tanto hablan de libre comercio, que lo practiquen”, manifestó. También cuestionó el embargo de Estados Unidos a Cuba.

No obstante, afirmó que “América Latina no es enemiga de Estados Unidos y, además, puede ser una contraparte responsable y fecunda para ese país”. Consideró que existe actualmente una “oportunidad para construir una nueva relación con EEUU”. “Pero no para que Estados Unidos sea el gendarme, sino para construir un relacionamiento de igual a igual, donde haya respeto y tolerancia mutuos, con cada país resolviendo sus problemas soberanamente y discutiendo, con visión estratégica, una agenda que no favorezca a uno solo sino a todos”, acotó.

Valoró positivamente la relación entre ambos países durante las gestiones como embajadores de Frank Baxter y Julissa Reynoso. “Creo que es una demostración clara acerca de la nueva perspectiva que, entiendo, el gobierno norteamericano ha comenzado a elaborar sobre América Latina. Hay nuevas condiciones o, por lo menos, necesidades favorables para definir una agenda común”, opinó. Estimó que “parecería” que Estados Unidos “está cambiando” su actitud imperialista, y mencionó como indicadores de esto la “visita del vicepresidente de Estados Unidos a países de la región” y un discurso de Obama.

Vázquez también se refirió a la integración en la región. Afirmó que “Brasil tiene que desempeñar su liderazgo en América del Sur” y valoró que ha tenido “obstáculos y dificultades” para hacerlo. Dijo que América Latina tiene la “mayor vocación integracionista” y es al mismo tiempo la región “más ineficiente para concretar la integración”. “América del Sur no tiene una integración real. En los procesos de integración todavía falta mucha política de alto nivel y de relacionamiento entre los gobiernos. Hay muchos planes de integración donde todo parece estupendo y después, cuando hay que bajar a tierra y aplicar esos planes, se concreta muy poco”, declaró, en un tono similar al de sus discursos durante las cumbres del Mercosur cuando fue presidente.