Mantuvo el tono no confrontativo que plantea para esta campaña, pero buscó dejar en claro que el objetivo es el gobierno nacional y no un mero posicionamiento en la interna nacionalista de cara a 2019. De esa manera el diputado y precancidato nacionalista Luis Lacalle Pou cerró el sábado la tradicional reunión herrerista en La Paloma, llamada para esta ocasión “A gobernar”.

Esta vez, en lugar de la típica reunión anual de una cincuentena de dirigentes cercanos al ex presidente Luis Alberto Lacalle, el encuentro de La Paloma fue un evento de cerca de 300 personas, realizado bajo una gran carpa instalada en el balneario esteño. En esta oportunidad no concurrieron solamente dirigentes herreristas. La reunión terminó siendo una suerte de cónclave de Todos Hacia Adelante (el bloque que impulsa la candidatura de Lacalle Pou) y sirvió como lanzamiento para la campaña de la elección interna, con participantes del Movimiento Nacional de Rocha, del Espacio 40 y de todos los sectores que apoyan la carrera presidencial del diputado.

Al comienzo del encuentro, el sociólogo Óscar Licandro hizo una presentación en la que destacó algunos atributos de Lacalle Pou. Sostuvo, sobre la base de datos de cuatro encuestadoras, que la intención de voto del diputado “crece en forma sostenida” y que el hijo del ex presidente “emerge como el candidato que desafía el liderazgo consolidado” y “ofrece una esperanza de cambio”. Según resumió un dirigente del sector, el análisis de Licandro apuntó a que “las personas tienen una percepción particular de Lacalle Pou y no lo relacionan con su padre; él tiene una voz y un posicionamiento propios, pero no está apegado a sectores y dirigentes que lo promocionan y que patrocinan su candidatura”.

Tras unas breves palabras del coordinador de los grupos programáticos, Pablo da Silveira, y de dirigentes de los principales actores políticos, cerró el acto Lacalle Pou. En su discurso prometió no hacer “ni un solo recorte a los planes sociales”, aunque aseguró que la “emergencia no puede ser eterna”. “Van diez años de bonanza económica, y hay más de 170.000 uruguayos viviendo en forma indigna. No es lógico”, expresó.

Hizo énfasis en el “cuidado” de la gente “en el sentido más amplio e integral, de todas las actividades y sentimientos del individuo”. También cuestionó que, a pesar del aumento en el presupuesto destinado a la Salud Pública (que cuantificó en 27%) y de que ésta tiene 200.000 afiliados menos, “se muere gente tratando de conseguir una cama de CTI”.

El precandidato presidencial se comprometió a que su gobierno, en caso de que resulte electo, se dedique a “mejorar lo que está bien, lo que está mal, cambiarlo, y lo que no se hizo, hacerlo”.

En otro pasaje, volvió a cuestionar la gestión del ministro del Interior, Eduardo Bonomi, señalando que éste “no confía” en el cuerpo policial, y dijo que es necesario “respaldar a la Policía” en su actividad. Por último, Lacalle Pou dijo que su generación “tiene la obligación del cuidado del medio ambiente” y aseguró que “hay que ser inflexibles” en esa tarea. “El derecho medioambiental no se negocia. Ni con Aratirí”, aseguró el diputado.

Varios asistentes a la reunión en La Paloma destacaron que el precandidato continuó con la línea de no mantener un estilo confrontativo en la campaña, algo que se comprometió a mantener en los próximos meses. “No me van a sacar de este tono. Gritar no sé, ni me interesa”, dijo el diputado nacionalista en el cierre del acto. De esta manera, Lacalle Pou ratificó el “estilo” que busca para esta campaña, opinaron desde su entorno más cercano. “Si pensás en ser gobierno hay que tratar de generar puentes y no ahondar brechas con el resto de los sectores políticos”, resumió el diputado Álvaro Delgado, uno de sus principales allegados.

Amor profundo

Tras el encuentro, Lacalle Pou concurrió a una reunión de la Regional Este de la Concertación Republicana Nacional que se estaba llevando a cabo en paralelo, en el balneario La Aguada. Este sector es encabezado por el senador Jorge Saravia, que sigue en carrera como precandidato presidencial nacionalista, aunque ha tenido varios acercamientos “programáticos” con Todos, según admitió el propio legislador.

Saravia había invitado a Lacalle Pou a saludar a su dirigencia. Éste accedió y concurrió acompañado por los diputados Delgado y José Carlos Cardoso. En pleno abrazo entre ambos precandidatos, Lacalle Pou fue consultado por un eventual “acercamiento”, algo que fue negado por el diputado: “El calor no da para tanto, pero somos respetuosos de los grupos y las decisiones, si bien somos del mismo partido. Acá no hay nada más ni nada menos que dos compañeros”. Saravia, por su parte, se limitó a decir que “el partido debe mostrarse en unidad si quiere ser gobierno”.

A pesar de que todavía no hay ningún acuerdo de por medio, Cardoso dejó en claro que Todos está interesado en llegar a algún tipo de entendimiento electoral con Saravia: “No se comunicó ninguna decisión, pero nosotros estamos dispuestos y abiertos a un entendimiento”.

Tras el encuentro de su sector, Saravia advirtió a Canal 12 que “se viene un escenario crítico para el país en materia económica”: “El modelo neoliberal del gobierno de Tabaré Vázquez, agregado al de José Mujica, que prometió un giro a la izquierda y un cambio en las políticas económicas y no fue así, y está trayendo como consecuencia graves problemas para el país”. Según dijo el ex senador del Espacio 609, “lo que le cabe al Partido Nacional es sacar al Frente Amplio del gobierno. Si gana Vázquez, nos lleva al caos económico y social para los próximos años”.