“Para nosotros, sería muy conveniente terminar este período parlamentario con la ley aprobada, y muy frustrante que todo fuera para atrás”, opinó el senador Ernesto Agazzi (MPP). El acuerdo con el PC, que funcionó en la Cámara de Diputados para votar por dos tercios el proyecto, se cayó en el Senado por la oposición de Proba, por lo que, según explicó Agazzi, se optó por empezar un período de negociación en la interna frenteamplista y con la oposición.

Esa negociación es llevada adelante por Topolansky, según informó El Observador el domingo. La propuesta a negociar plantea votar la creación del ente autónomo y la integración de su Consejo Directivo provisorio (que tendrá cuatro integrantes nombrados por el Poder Ejecutivo [PE] con venia del Senado, un representante de los docentes y un representante de los estudiantes), y excluir de la ley la integración del Consejo Directivo Nacional, el órgano encargado de conducir la Uned después del período de transición, dejando la discusión sobre el cogobierno y la autonomía para el próximo período de gobierno.

Según el proyecto que se aprobó en Diputados, este consejo está integrado por dos representantes de todos los órdenes (estudiantes, docentes y egresados), el rector y los directores regionales de la Uned. La oposición reclama que haya representantes nombrados por el PE en este consejo, la Proba reclamaba uno y el PN tres (dos pertenecientes al partido de gobierno y uno a la oposición).

No a cualquier costo

El director nacional de Educación, Luis Garibaldi, dijo que no conoce a fondo la propuesta que se está negociando, pero opinó que el nuevo organismo “requeriría las mismas características de las otras universidades, de la Universidad de la República y de la Universidad Tecnológica, que se votaron con cogobierno, que en este caso también debería mantenerse”. Indicó que el Ministerio de Educación y Cultura se planteó como alternativa de negociación extender el período de transición de tres años -como está planteado hoy- a cinco o seis años. Reafirmó que es “imprescindible que [la nueva universidad] tenga un estatus similar al de las otras”, establecido por ley. Aseguró que si la bancada frenteamplista llega a un acuerdo sobre esta propuesta, “el ministerio no tiene más remedio que aceptarla”. “Pero tampoco creemos que podamos tener una universidad a cualquier costo”, opinó.

Desprolijidades

El diputado Roque Arregui (PS), que ha trabajado en la cámara baja en este proyecto, aseguró que el PS rechaza la alternativa propuesta por Topolansky: “No estamos de acuerdo con que se vote la creación de un ente autónomo y que en la ley no esté establecido cómo va a estar integrado el Consejo Directivo permanente. Es muy desprolijo, a nuestro modo de ver”.

Reconoció “la muy buena voluntad en cuanto a buscar una forma de salir del paso”, pero aseguró que si no se establece la integración del órgano de conducción en la ley, esa definición “va a estar sujeta a los avatares de lo que suceda en las elecciones nacionales”.

A entender de la bancada del PS, después de buscar negociar con la oposición, en marzo o abril, “hay que someter a votación el proyecto que se aprobó en Diputados, y que cada uno asuma sus responsabilidades ante la ciudadanía, los que ponen por encima la creación de la universidad y los que no”.

El senador Enrique Rubio (Vertiente Artiguista), en cambio, considera que la propuesta permite “comenzar el funcionamiento y no trabar lo que se está haciendo”. “Es una idea ingeniosa para permitir seguir trabajando y postergar la definición del punto crítico”, que son el cogobierno y la autonomía, destacó. Aseguró que el FA “va a seguir sosteniendo el cogobierno, pero será en el marco de un nuevo gobierno”.

El Frente Liber Seregni está a favor de negociar con la oposición. El Partido Comunista, según explicó el senador Eduardo Lorier, lo está analizando.

Agazzi dijo entender a quienes plantean que quieren aprobar “todo o nada”, pero enfatizó que el actual sistema de formación docente “es un desastre”: “Tienen administraciones totalmente separadas, algunas cosas dependen de Primaria, otras de Secundaria, y en la Universidad de la República no hay formación docente. Es medio vergonzoso: no tienen un grado de formación exigible para sus docentes”. Insistió en que “sería muy frustrante terminar este período parlamentario con el actual sistema de formación docente”.

Transitorio, no

Tampoco está claro si la propuesta que está negociando Topolansky es respaldada por la oposición. El senador nacionalista Gustavo Penadés, que participa en las negociaciones, dijo que el PN respalda el cogobierno, pero con la representación del PE. “Pero el FA hace cuestión de que no puede ser así; es ahí donde existen las mayores diferencias”, señaló. Para el senador, “es impensable que en una universidad que se va a dedicar a la formación de docentes -cuando todo el mundo reconoce que uno de los problemas centrales de la educación es justamente la formación docente- no esté el PE representado y, a través del Ejecutivo, los partidos políticos”. “No se puede pensar nada de acá a 20 años sin representación política”, reafirmó.

Penadés asegura que la propuesta planteada por Topolansky permite negociar, pero, de todas formas, advierte que los nacionalistas no quieren dejar fuera de la ley la definición sobre la integración del Consejo Directivo Nacional: “No nos cerramos a ningún tipo de negociación, pero no se puede hacer en base a todo o nada, o dejando abiertas cosas transitorias. Eso no nos estaría conformando”.