El senador colorado Ope Pasquet convocó a los ministros en régimen de comisión general, principalmente para conocer las medidas que está adoptando Uruguay ante la decisión de Argentina de prohibir los transbordos de sus buques en puertos de nuestro país: “Esto va directamente contra la idea de Montevideo como puerto hub. Va contra la línea de flotación de los intereses portuarios del país, y tenemos que dar una respuesta acorde con la amenaza. [...] El gobierno ha sido extraordinariamente discreto en manejar este tema, seguramente por la delicadeza del tema. Pero la prudencia no implica hacer como que acá no pasó nada”.

Evaluó que el gobierno uruguayo no actuó a tiempo para evitar la medida tomada por Argentina. Citó las actas de las reuniones del subgrupo de Transporte del Mercosur (SGT5), en las que reiteradamente se instó a Uruguay a que entregara informes técnicos que demostraran el impacto que tendría para el país la firma del Acuerdo Multilateral de Transporte Marítimo del Mercosur. Uruguay se negó desde el inicio a firmar este acuerdo; ésta fue la razón por la que Argentina tomó la decisión. “Uruguay permaneció estático, sin variar su posición desde 2005. No llegó a contrapropuestas viables. Uruguay dijo que iba a presentar estudios técnicos que demostraran el impacto, y no los presentó. Hay un deber de buena fe que obliga por lo menos a presentar los fundamentos técnicos”, cuestionó Pasquet.

Almagro respondió que Uruguay planteó todos los años en el SGT5 que no iba a firmar ese acuerdo, porque perjudicaba sus intereses: “El estudio de impacto se realizó. Y no se presentó el informe, se presentaron sus resultados, que es más de lo que cualquier país ha tenido que hacer en el Mercosur para justificar una posición”. En esas reuniones se aclaró que Uruguay estaba abierto a la negociación de un nuevo acuerdo multilateral de cargas del Mercosur.

En diciembre de 2012, Uruguay comenzó a negociar con Argentina para un acuerdo bilateral de transporte marítimo, pero la iniciativa quedó trunca después de la decisión del gobierno uruguayo de autorizarle a la pastera UPM el aumento de producción. Almagro dijo que no conoce las razones por las que Argentina tomó la medida referente a los transbordos, pero hizo notar que “todo empezó a pasar después de la autorización a UPM”: “Si no se hubiera dado la autorización, no hubiera existido la decisión 11/08 [referente a los transbordos]”. No obstante, defendió la resolución del gobierno uruguayo, y sostuvo que se tuvo que tomar porque “el país se respeta a sí mismo”.

En las conversaciones mantenidas por Almagro y el canciller argentino Héctor Timerman tras la medida argentina, el primero le transmitió al segundo que la disposición sobre transbordos es “altamente inconveniente para el desarrollo de la actividad logística, [y es] inadmisible y violatoria de todos los acuerdos del Mercosur”. Sostuvo además que viola el protocolo de comercio y servicios del Mercosur, que establece que se debe dar a las naciones del bloque un trato “no menos favorable” que el que se les da a otros Estados partes y a otros países. Según informes jurídicos citados por Almagro, también viola el reglamento del comité intergubernamental de la Hidrovía Paraná-Paraguay, que Argentina suscribió.

Uruguay no descarta recurrir a mecanismos de solución de controversias en el Mercosur por este tema, aunque la situación cambió un poco con la conformación de una mesa de diálogo entre ambos países luego de la reunión que mantuvieron en La Habana los presidentes José Mujica y Cristina Fernández. Ahora, Uruguay le plantea a Argentina suscribir un acuerdo de transporte marítimo “muy semejante al que tiene Argentina con Brasil”, según Almagro.

Otros destinos

Pasquet se mostró conforme con la actitud de seguir dialogando, pero estimó que no puede esperarse mucho de ello. En contrapartida, llamó a fortalecer las capacidades del puerto de Montevideo, para volverlo atractivo para las cargas de otros países. Por ejemplo, no incrementando la carga tributaria.

Pintado informó que se mantienen conversaciones con Paraguay por el tema puertos desde hace tiempo, pero que, a raíz de la medida de Argentina, “lamentablemente terminaron siendo una respuesta” a esa resolución. Dijo que se evalúa hacer espacio en Puntas de Sayago para los contenedores que lleguen de Paraguay, para que puedan cargarse en puertos uruguayos.

“Uruguay ha priorizado el tema puertos y navegación por encima de casi todos los demás puntos de la relación con Argentina, por su carácter estratégico”, sentenció Almagro. Defendió la estrategia de Uruguay de “avanzar sin entregar soberanía”, la que “lamentablemente no siempre fue comprendida por el sistema político, ni siquiera por el sistema empresarial”. “La estrategia es negociar. Y cuando se nos pide algo inadmisible, congelar la negociación y empezar de nuevo”, explicitó.

El senador nacionalista Luis Alberto Lacalle opinó que el gobierno tiene “una actitud de ingenuidad y de confianza en la benevolencia de Argentina”, porque se cree “el famoso cuento de la nación latinoamericana”. Así siguieron las habituales valoraciones, del oficialismo y de la oposición, respecto de la relación con Argentina, la actitud del gobierno y la falta o abundancia de profesionalismo en la cancillería. Sobre el final, Almagro valoró que no hubo cuestionamientos de fondo al rumbo de la política exterior: “No hay ninguna instancia en que se haya dicho: ‘Ustedes deberían haber hecho esto, y en cambio hicieron esto’. Acá no se cayó una sola idea”.