“‘En los últimos dos años y medio me pusieron cinco veces un revólver en la cabeza; laburo para los delincuentes’, esto es lo que nos decía hace un ratito un vecino de Colón”. Fueron las primeras palabras del precandidato a la presidencia por el Partido Colorado (PC) Ernesto Talvi (del sector Ciudadanos), al iniciar un acto ayer de noche en Paseo Colón (Lezica y Garzón), luego de terminar una gira de dos meses y medio por los 19 departamentos del país.

Talvi subrayó que los vecinos de Colón le contaron que por la inseguridad se transformaron en “escoltas” de sus hijos adolescentes como si fueran niños, porque tienen temor “de que vayan y vengan solos”. Otro tema que surgió en la charla con los vecinos, y que “también duele”, según Talvi, es que “la gente está perdiendo confianza en la política”. Eso es “peligroso” porque “es el principio del populismo y el autoritarismo”, opinó, aunque dijo que “comprende perfectamente” ese sentimiento.

“Hoy estamos invadidos día tras día con cosas como las de la empresa Envidrio, una empresa dirigida por un diputado, siendo que recibe financiamiento del Estado, lo que es inconstitucional; una empresa que hace trabajar a empleados que están en seguro de paro, que es ilegal”, sostuvo el precandidato, y agregó que el Frente Amplio (FA) “cajoneó” los resultados de la investigadora sobre presuntas irregularidades en la regasificadora, “para que ni la ciudadanía, ni la Justicia, ni la prensa tengan acceso a la información”. “Entonces, es lógico que la ciudadanía empiece a perder la confianza, pero es lo que pasa cuando un partido se siente dueño del poder”, alegó.

Talvi dijo que también duele cuando los vecinos le cuentan sobre la falta de empleo, que es otro de los temas sobre los que le hablan “en todo el país”. Afirmó que ha cerrado “una cantidad enorme de empresas”, especialmente en el interior, y que se perdieron “60.000 empleos”, de modo que quienes se quedaron sin trabajo “no lo pueden recuperar”, y quienes lo buscan por primera vez “no lo pueden encontrar”. “Además, estamos hipotecando el futuro, porque hoy sólo 38 de 100 chiquilines terminan el liceo. Leen y no saben interpretar lo que leen, no comprenden los textos. Un profesor en Colonia nos contaba que en 2001 tuvo que dejar la tarea docente y la retomó en 2014; desempolvó las pruebas que hacía en 2001, y no las pasó nadie. Él tuvo que bajar el nivel”, relató.

El precandidato subrayó que esa es “la realidad que vivimos hoy” y que no la está “inflando”. Agregó que “a lo largo y ancho de país” los padres le dicen que quieren que sus hijos “estudien y se vayan porque en el país no hay futuro”, y “los chiqulines” le dicen “que están asustados, que no ven un porvenir”. “Después de 13 años de gobierno del FA, hay más personas pensando en irse que las que había en la crisis de 2002, que fue la más grave que tuvo en su historia. O sea que estamos ante un proyecto político agotado, que se ha quedado sin ideas, sin capacidad alguna de darles respuesta a los principales problemas y desafíos que tiene el país”, aseguró.

Por otra parte, señaló que la gira por los 19 departamentos le permitió echar a andar su organización política, y que hoy Ciudadanos tiene representantes en todos los departamentos, aparte de que “en la gran mayoría de los eventos” tuvieron una “asistencia enormemente nutrida”, con “muchas familias” y “mucha gente joven”, que se entusiasma porque “hay otro Uruguay posible” porque el proyecto de su sector “es serio” y “con propuestas concretas para llevarlo adelante”.

Por último, Talvi comentó que competirá en la interna de PC con dos precandidatos, el de Uruguay Batllista, que ya se anunció (el senador José Amorín Batlle) y el de Batllistas, “que no se ha anunciado pero que se comporta como un candidato”, por lo que asume que será candidato, el ex presidente Julio María Sanguinetti. Evaluó que será una interna “competitiva” y que le va a dar energía al PC. No obstante, subrayó que la propuesta de Ciudadanos “tiene muy buena aceptación fuera de las fronteras del PC, cosa que no pasa con las otras corrientes internas”.