A raíz de los problemas con las cuentas bancarias de las farmacias que venden marihuana, desde fines de 2017 el Instituto de Regulación y Control del Cannabis (Ircca) venía barajando la posibilidad de habilitar una nueva forma de expendio, paralela a la que se realiza en farmacias, que tendría como fin exclusivo la venta de la droga y de accesorios vinculados con su consumo, pero no productos farmacéuticos tradicionales (como medicamentos).
La habilitación de este tipo de expendios requiere un decreto en el marco de la ley de farmacias (15.703), y se preveía concretar esa nueva norma en este semestre de 2018, para luego hacer un llamado público a interesados y otorgar las licencias de instalación. Sin embargo, si bien el Poder Ejecutivo sigue pensando en esa estrategia, por ahora no la llevará adelante, ya que “para poder ser implementada requiere de una mayor evolución en la fase de producción, a fin de poder garantizar un adecuado abastecimiento a los nuevos puntos de venta”, dijo la diaria Diego Olivera, secretario general de la Secretaría Nacional de Drogas y presidente de la Junta Directiva del Ircca.
En tanto, el Ircca publicó hoy un informe sobre el estado de la implementación de la ley de regulación del cannabis, a fin de “facilitar el monitoreo de la política de regulación por todas las partes interesadas”, indicó Olivera. Este tipo de informes se dará a conocer cada dos meses.
En ese documento se señala que el mercado regulado de marihuana alcanza a 54% de las personas que la consumen (y que son unas 147.000 personas en total, con edades de 18 a 65 años). Ese 54% abarca a quienes están registrados en alguna de las modalidades habilitadas (autocultivo, clubes cannábicos y adquirentes en farmacias), pero también considera “las situaciones en las que los usuarios acceden a la sustancia regulada aunque no estén inscriptos en ninguno de los registros, es decir, porque alguien que está registrado se la proporciona”, se señala en el documento.
El informe también indica que el departamento con mayor nivel de adquirentes registrados en términos relativos es Maldonado, con 18 personas por cada 1.000 habitantes mayores de 18 años, mientras que en Rivera se verifica el menor nivel del país, con 1,03 cada 1.000. El Ircca adjudica esta diferencia a lo que denomina “efecto farmacia”, ya que “la cantidad relativa de adquirentes cada 1.000 habitantes en los departamentos con farmacia habilitada”, que es 11,8, resulta “cuatro veces mayor que en los que no tienen farmacia habilitada”, en los que es 2,9.
En cuanto al perfil de los adquirentes –que son un total de 23.613–, el informe señala que una leve mayoría de los usuarios registrados (51,8%) declaró “trabajar en el sector privado”, mientras que 12,2% dijo que lo hacía en el sector público. “Asimismo, es oportuno señalar que dentro de la proporción de personas que declaran no tener actividad (25,3%), debe considerarse a los inactivos (grupo conformado por estudiantes y jubilados), dado el perfil de edad mostrado por los adquirentes”, explican los autores del documento.
Otra información de interés es que desde que se habilitó la venta de marihuana en farmacias, el 19 de julio de 2017, hasta el 5 de abril de este año, se vendieron 150.431 paquetes de cannabis de cinco gramos, lo que significa un total de 752.155 gramos. Hasta el 5 de abril, sólo 75,8% de los registrados había comprado marihuana en farmacias. El resto aún está a tiempo.