Ayer a las 11.00 la Mesa del Directorio del Partido Nacional (PN) recibió a integrantes de la Unión Autónoma de Obreros y Empleados de la Compañía del Gas (Uaoegas), pero la reunión terminó a los gritos y con acusaciones cruzadas. Los sindicalistas aseguraron que los nacionalistas los usaban con fines electorales, y los dirigentes del PN señalaron que no permitirían que se los increpara por un error que determinó la larga demora del encuentro. A pesar de que la situación fue tensa, más tarde ambas partes prefirieron bajarle el perfil al enfrentamiento.

La historia comenzó el 17 de noviembre de 2016, cuando el sindicato pidió por primera vez una reunión con el directorio del PN. Ante la falta de respuesta, la solicitud fue reiterada el año pasado. Según un documento al que accedió la diaria, la nota correspondiente fue recibida por la administrativa Claudia Mercado el 16 de marzo. En ese momento, los trabajadores querían saber cuál era la posición de los blancos sobre el proyecto de regasificadora y qué alternativas manejaban.

La nota fue tratada por el directorio recién el lunes 2 de abril de este año, que decidió recibir a los trabajadores ayer. Pero la asamblea de Uaoegas había interpretado que el PN procuraba obtener un rédito electoral y afirmó la semana pasada, en un comunicado, que no se iban a “prestar a dicho juego”. Eso fue lo que los sindicalistas le transmitieron en persona ayer a la Mesa, integrada por el presidente del directorio, Luis Alberto Heber, la secretaria Beatriz Argimón y el diputado Pablo Abdala. Según relató Alejandro Acosta, integrante de Uaoegas, Heber decidió terminar en forma abrupta la reunión, alegando estar ofendido, pero lo hizo porque Uaoegas puso sobre la mesa la responsabilidad del PN en la crisis del sector. Acosta dijo que Heber les “tomó el pelo” y los quiso “acusar de estar haciendo campaña por el Frente Amplio”, y le respondieron que el sindicato ocupó el Ministerio de Industria, Energía y Minería cuando lo creyó necesario.

Abdala admitió que la reunión se complicó y dijo que quedó “muy desconforme”. Según comentó a la diaria, el sindicato mantuvo una posición “muy rígida”, cuestionando al PN y atribuyéndole responsabilidades por la crisis que está atravesando el suministro de gas por cañería. El diputado sostuvo que esperaba hacer reflexionar a los sindicalistas y llegar “a un ámbito de diálogo e intercambio civilizado”, y enfatizó que el PN no está usando a nadie para “obtener réditos políticos, y mucho menos a los dirigentes sindicales”, pero dijo que a pesar de que se “acaloraron las cosas”, no pasó “nada extraordinario”. También señaló que hubo varias instancias de intercambio con el sindicato en las que él fue representante del partido, pero admitió que la demora de la reunión se debió a un error: según Abdala, el pedido se traspapeló.