El silencio del Ministerio del Interior sobre el director nacional de Policía se quebró hoy y dejó desnuda una disputa sobre la visión de la seguridad entre el Ejecutivo y parte del Frente Amplio (FA), con el fiscal general de la Nación, Jorge Díaz, en el medio.
El sábado, Layera dijo a El Observador que Uruguay se encamina a “un escenario como El Salvador o Guatemala” y que “el Estado se verá superado” ante la delincuencia. Además, cuestionó al Ministerio de Desarrollo Social (Mides) y al Banco de Previsión Social (BPS) por no dar información a la Policía que le permita “ver el perfil de la gente con la que estamos tratando”. Afirmó también que el gobierno tiene “temor” de “tomar decisiones difíciles para contener esto”.
A través de un video publicado por la Unidad de Comunicación del Ministerio del Interior, el titular interino de la cartera, Jorge Vázquez, salió a respaldar públicamente a Layera. “No dijo nada que no hayamos dicho antes”, expresó. “Por una declaración que siempre es corta -siempre son cortas- y no queda suficientemente explicada- sería una injusticia [que se fuera]”, agregó. Según Vázquez, algunas partes de lo que Layera dijo “se le fueron de contexto”. Entre esas partes incluyó que el futuro del país sería como El Salvador o Guatemala: “Se han hecho muchas cosas para evitar irnos por ese camino y nos quedan herramientas para seguir trabajando para no tener las maras”, dijo en referencia a los grupos que azotan a esos países de Centroamérica. “Lo que planteó el director de Policía es que es un horizonte posible siempre que no se hagan cosas, pero cosas estamos haciendo”, aseguró Vázquez.
Respecto al intercambio de información con otros organismos, expresó que la situación ha mejorado, pero que “lo deseable sería que el Ministerio del Interior pudiera entrar en la base de datos de los otros organismos, que hoy no puede”, sostuvo. Por último, cuestionó el debate púbico que se dio con la adquisición del Guardián y se quejó de que “ahora los delincuentes saben que el Guardián no intercepta Whatsapp”: “Las investigaciones van a seguir adelante, pero esto es una mayor dificultad para avanzar”.
Acumulado
Ayer, entrevistado por Televisión Nacional, el fiscal de Corte, Jorge Díaz, fue uno de los que cuestionaron a Layera, por su “fatalismo” y “falta de autocrítica”: “Todo el reportaje al inspector Layera está centrado sobre una premisa: nosotros hacemos todo bien, los demás hacen todo mal”. También cuestionó la “excusa” de que los delincuentes se comunican por Whatsapp. “Hace cuatro años que sabemos que los delincuentes se comunican por Whatsapp, y los procedimientos por drogas son casi nulos, son muy pocos. [...] ¿No sabemos investigar de otra manera que no sea interceptando teléfonos?”, cuestionó. Según Díaz, “si hacemos un diagnóstico pero no relatamos las acciones concretas que tenemos que hacer para revertir esa situación, entonces hay una cuestión de fatalismo: ‘esto es así, va a ser así, no hay manera de cambiarlo’. Entonces, renuncio y me voy”, sugirió.
Por su parte, la directora del Banco de Previsión Social (BPS), María del Rosario Oiz, dijo a radio Carve que el organismo da toda la información que solicita la Policía y que el límite es la reserva de datos.
No nos representa
Las declaraciones de Layera también generaron molestia en una parte de la dirigencia del FA, que sin embargo prefiere ser cauta en las expresiones públicas. Ayer el presidente de dicho partido, Javier Miranda, fue consultado por Telemundo sobre el tema. Se limitó a señalar que las afirmaciones de Layera “exigen reflexión serena, de análisis de la coyuntura que se está viviendo” y “del proceso de violencia en la sociedad”. “Estamos teniendo dificultades”, acotó.
En tanto, el sector frenteamplista Casa Grande resolvió ayer por la tarde pedir la remoción de Layera, porque entiende que sus declaraciones fueron “gravísimas”, “muy irresponsables” y “dejan muy mal parado a todo el gobierno”, dijo a la diaria el senador suplente del sector, Rafael Paternain. “Nosotros vamos a solicitar la remoción, porque no nos representan su pensamiento ni su forma de ver los problemas de fondo. Además, sus declaraciones tienen un impacto político absolutamente inconveniente y comprometen a todo el gobierno del Frente Amplio, no sólo al Ministerio del Interior”, advirtió.
“Muchos sectores dentro de la izquierda hemos tratado de mantener un equilibrio entre una crítica con una perspectiva de izquierda y también mucha responsabilidad política. Acá tenemos una crítica que es de derecha y con un nivel de absoluta irresponsabilidad política. Se dan las dos condiciones para que alguien no se pueda sostener en un cargo de confianza política en un gobierno del Frente Amplio”, remarcó. El sociólogo y legislador recordó que el gobierno atraviesa una coyuntura complicada en materia de seguridad. “Hay algunos indicadores que son muy preocupantes. Las tasas de homicidio se han disparado, venimos de una interpelación muy dura, dentro de la izquierda hay posiciones encontradas en torno a esto [la seguridad], entonces, que un director de la Policía termine dando argumentos que por otra parte son avalados, en su catastrofismo, por la visión más propiamente conservadora y de derecha, genera una cantidad de consecuencias”, advirtió.