La ex senadora Michelle Suárez presentó su renuncia al Partido Comunista del Uruguay (PCU). En una carta que entregó a sus correligionarios difundida ayer por El Observador, la abogada sostuvo que correspondía que hiciera público su alejamiento, tal como cuando dejó en diciembre del año pasado su banca en el Parlamento. El secretario general del PCU, Juan Castillo, dijo en conferencia de prensa que la carta va a ser analizada a principios de junio por el Comité Central del partido y que los argumentos de Suárez son “compartibles y aceptados”.

“Espero que con el tiempo, todos aquellos que cometimos errores y los reconocimos podamos cerrar las heridas, tras saldar nuestras cuentas, en respeto al Estado de derecho”, expresó. Asimismo, la ex senadora pidió “disculpas a mis queridos compañeros, por cualquier zozobra vivida en mi nombre”.

Suárez fue condenada a cumplir prisión domiciliaria por cuatro delitos de falsificación de firmas y un delito de estafa y falsificación de un documento privado. En su momento, la abogada admitió ante la Justicia haber falsificado la firma de un cliente en un juicio por la patria potestad de una menor, y también la firma de un cliente para que pudiera realizar el trámite para cambiar su sexo.

La ex legisladora aseguró que debía enfrentar en su “fuero íntimo la tarea de perdonarse a sí misma”,que “poco tiene que ver con la mirada ajena”. Además, opinó que no puede “permanecer en silencio” y perjudicar, “sin intención alguna, el trabajo genuino y honesto de mis compañeros, que nada tienen que ver con mis avatares personales”.