Ayer en el Ministerio de Relaciones Exteriores, se firmó un acuerdo entre Uruguay y la Corte Permanente de Arbitraje de La Haya para establecer en Montevideo una sede de esa institución. Según explicó el canciller Rodolfo Nin Novoa en conferencia de prensa, esto le permitirá a Uruguay “ampliar las opciones de soluciones pacíficas de controversias con las que puede contar como Estado y, al mismo tiempo, ofrecer a los inversores un elemento adicional para seguir confiando en el país y en la seriedad de sus políticas públicas”.

Tras la conferencia, Nin se refirió a varios temas en rueda de prensa. Dijo que el domingo y el lunes se hará una nueva cumbre del Mercosur, y que Paraguay le traspasará la presidencia pro témpore del bloque a Uruguay. El jerarca elogió la gestión paraguaya en el semestre que termina, y destacó que se intensificó la agenda de inserción internacional y de relacionamiento externo, “con muchas regiones y países del mundo”. “Lastimosamente, seguimos discutiendo nuestra relación comercial con la Unión Europea. Han aparecido algunas dificultades que no estaban en nuestra agenda, pero nosotros no podemos imaginarnos que por detalles nimios de indicaciones geográficas podamos perder un acuerdo de estas características”, señaló, y metafóricamente agregó: “No podemos perder el acuerdo por la grapa y la muzzarella”.

En segundo lugar, Nin Novoa indicó que entre los objetivos principales de la agenda de Uruguay cuando asuma la presidencia rotativa del bloque estará el acercamiento con China. “Esto no quiere decir que salgamos ya a hacer un acuerdo, sino que hay toda una tarea de preparación, que naturalmente tiene un correlato con lo que Uruguay ha hecho hasta el momento con China”, logrando avanzar “sustancialmente”, afirmó. Además, recordó que este año se cumplen tres décadas de relaciones diplomáticas entre Uruguay y el país asiático, y señaló que actualmente se está trabajando en memorandos de entendimiento para que Uruguay se incorpore a la iniciativa china llamada “La franja y la ruta”, que es “un proyecto de integración comercial importante con el resto del mundo”, en el que Uruguay “puede jugar un papel muy importante desde el punto de vista logístico”.

El canciller señaló que además se sigue trabajando en acuerdos con otros países, como Canadá y Singapur, como resultado “de esta nueva apertura que el Mercosur tiene hacia el mundo”, y subrayó que no son tratados de libre comercio, sino de “comercio administrado”. “Me da la sensación de que hay una creencia en algunos sectores de la población de que esto solamente son tratados comerciales. Pero con Europa tenemos un tratado que va más allá de lo comercial: abarca temas de cooperación, y de definición política”, explicó.

Por otra parte, el ministro habló de que hay expectativas por asumir la presidencia del Mercosur, dado que la última experiencia de Uruguay en el cargo (de diciembre de 2015 a julio de 2016) fue “bastante negativa”, porque “el tema de Venezuela” ocupó los seis meses del mandato y no se pudo “avanzar nada”. También informó que el martes Uruguay inaugurará su nueva embajada en Argentina, con un acto al que asistirán el presidente Tabaré Vázquez y su par argentino Mauricio Macri, quienes tendrán “instancias de diálogo”, además de las previstas en el marco de la cumbre del Mercosur.

Por último, consultado sobre la reunión de Donald Trump, presidente de Estados Unidos, con su par de Corea de Norte, Kim Jong-un, el canciller dijo: “Ojalá que esa intención de acercarse y dialogar se concrete en acciones firmes y definitivas, y no quede en una expresión de deseo”, ya que “el mundo está muy complejo y muy complicado como para que se agreguen nuevos problemas”, por los cuales “la paz y la seguridad internacional están corriendo algunos riesgos importantes”.