En el Centro General de Instrucción para Oficiales de Reserva (CGIOR) se colocó el jueves pasado una placa de la memoria, a solicitud del PIT-CNT, Madres y Familiares de Detenidos Desaparecidos y otras organizaciones sociales. La placa, que recuerda que allí funcionó un centro de detención y torturas desde 1968 y durante toda la dictadura, apareció vandalizada con pintura verde. No fue la única, otra placa similar, ubicada frente al Hospital Militar, fue vandalizada de forma similar, también con pintura verde y en la madrugada del domingo.

Hoy a las 14:30 los organizadores del acto en el Cegior presentarán una denuncia en la Fiscalía General de la Nación; el tema será discutido también por la Institución Nacional de Derechos Humanos. El Frente Amplio repudió los ataques con un mensaje divulgado esta noche por redes sociales, acompañado por las fotos de las placas vandalizadas: “En dictadura nos blanqueaban los muros que pintábamos. Porfiadamente supimos volver a poner las consignas. La lucha y la entrega no se tapa con pintura. Por los que dieron sus vidas por nuestra libertad; mil veces más se volverá a leer nuestro homenaje. La intolerancia no pasará”.

No es la primera vez que sucede algo similar con las marcas de la memoria; recientemente aparecieron inscripciones en el memorial instalado en las inmediaciones del penal de Libertad.

Nicolás Pons, director de cooperación internacional y proyectos del Ministerio de Educación y Cultura, dijo a la diaria que si bien se trata de cuestiones “ridículas”, que generan un daño material que puede ser reparado, no deja de ser una expresión de intolerancia. “Son quizás luces de alerta que vale la pena tener presentes y poder estar a la altura de los acontecimientos para responder institucionalmente”, indicó.

El MEC avisó a las instituciones que solicitaron la placa para que realicen la denuncia policial y también se puso en contacto con el Ministerio de Defensa Nacional “para informar y compartir la preocupación”, indicó Pons. Funcionarios de la Dirección de Inteligencia del Ministerio del Interior investigan por estas horas las filmaciones de las cámaras de seguridad cercanas al Hospital Militar y al CGIOR.

En el CGIOR no hay guardia permanente, por lo que se utilizarán las cámaras de vigilancia instaladas en la zona para intentar determinar quiénes fueron los causantes del daño. Por el momento, no hay elementos que permitan identificarlos, apuntó Pons.