Ayer, Gabriela Fulco, presidenta del Instituto Nacional de Inclusión Social Adolescente (INISA), dijo en una entrevista con Búsqueda que “el quiebre” de códigos de algunos jóvenes es “tan profundo” que no hay “esperanza” de rehabilitarlos. Unas horas después, el Sindicato Único de Trabajadores del Instituto del Niño y Adolescente del Uruguay y del INISA emitió un comunicado en el que afirmó que no es la primera vez que Fulco “se despacha con declaraciones que no sólo no compartimos sino que nos preocupan”. Añadió que el gobierno también debería preocuparse, ya que es el “responsable por las designaciones que hace”. “Claramente [Fulco] debería dejar su puesto, después de decir que hay jóvenes que no se pueden recuperar, algunos que no saben ni hablar y otros que emiten sonidos guturales”, se señaló en el comunicado. Por último, el sindicato sostuvo que “esta pretendida embanderada de los derechos humanos, supuesta experta en temas carcelarios, no ha podido con unos cuantos adolescentes de los que dice compadecerse, pero a los que a la vez [...] expone al escarnio público con estas declaraciones”.