La polémica sobre la licitación de las cámaras de reconocimiento facial de la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF) estuvo ayer en el orden del día de la Comisión Especial de Deporte de la Cámara de Representantes. El subsecretario del Ministerio del Interior (MI), Jorge Vázquez, citado por el diputado nacionalista Pablo Abdala, compareció ante la comisión para explicar cuál fue el rol del MI en el proceso de la licitación. Al salir, el jerarca hizo hincapié en la efectividad de las cámaras elegidas, ya que en dos años no hubo “ningún episodio de violencia” y tan sólo existió “una detección errónea” entre las “miles de personas que pasaron por las cámaras de identificación facial”. Recordó, además, que en 2013 el MI se encontraba evaluando la posibilidad de incorporar nueva tecnología para “identificar a las personas violentas”, ya que algunos dirigentes de los clubes de fútbol habían manifestado en el Parlamento que tenían “miedo” de la reacción de los barras bravas. “Nosotros les dijimos: 'Ustedes ocúpense del fútbol; nosotros, de los delincuentes', y creo que nuestro proceso ha sido un éxito, porque no hemos tenido más episodios violentos”, señaló.

Con respecto al proceso de licitación, relató que la AUF fue asesorada por la consultora ITC y por el MI, que “desde el inicio” planteó cuáles eran las “condiciones indispensables” para que el sistema “funcionara bien”. Según Vázquez, la AUF realizó el pliego de licitación, aunque “podría haber hecho una compra directa”, y se presentaron varias empresas, que hicieron una prueba técnica en distintos espectáculos deportivos. Las que tuvieron mejor puntuación fueron DDBA y Servinfo. El entonces presidente de la AUF, Wilmar Valdez, le comunicó al MI que la propuesta de Servinfo era 16% más barata. “Lo que importa es cuál es la mejor”, aseguró Vázquez, y explicó que Servinfo tuvo 49% de acierto en la prueba y, en una segunda prueba, llegó a 74%, mientras que DDBA tuvo 99,8% de acierto. “Ahí Valdez sugiere hacer una nueva reunión con todos los técnicos [los de la AUF, ITC y MI]” y, en esa instancia, “aparece un nuevo elemento: una oferta a la baja de DDBA”, en la que la empresa, que tenía un precio por encima de Servinfo, “queda con una diferencia de 40.000 dólares”.

Para el diputado oficialista Luis Gallo, la exposición del jerarca fue “clara y contundente”. Según explicó a la diaria, los legisladores nacionalistas se centraron en discutir sobre el comunicado que el MI publicó el 9 de agosto, en el que sostiene que “jamás insinuó ni direccionó la contratación de las empresas que participaron en el llamado”. Gallo dijo que Vázquez explicó que el comunicado fue publicado porque un “medio de prensa los acusó de coima y corrupción”. También quedó “absolutamente descartada” la vinculación de Javier Vázquez, hijo del presidente de la República, con la empresa DDBA. “Él mismo lo llamó preguntándole [a Javier Vázquez] si integraba la empresa. No hay ningún tipo de vínculo; los propietarios de DDBA desmintieron rotundamente todo tipo de vínculo con el hijo del presidente”, señaló.

Otra fue la lectura de Abdala, quien señaló a la diaria que si bien el jerarca detalló “paso a paso” lo que sucedió en el proceso de licitación, las “explicaciones no fueron convincentes”. El diputado nacionalista aseguró que existe una carta de la consultora ITC en la que “se ponderan otros factores” en la licitación, “no sólo el aspecto económico”. Por ejemplo, la consultora señaló que Servinfo poseía mejores niveles “en software y en hardware”, así como una propuesta de “colocar iluminación artificial en todas las puertas” de los estadios. El subsecretario del MI, relató Abdala, presentó un informe de ITC, firmado el 31 de octubre de 2016, en el que la consultora recomienda que gane DDBA. “A mí me parece hasta sugestiva, porque la consultora señala que si bien Servinfo había sido calificada como la mejor oferta, como los técnicos del MI insistieron, recomiendan que se le adjudique la licitación a DDBA. ¿Cómo leo eso? Mantienen su primera fundamentación, pero por alguna razón cambiaron la recomendación”.

Para Abdala, hay “elementos suficientes” como para “no dar por concluido este tema” y, por tanto, proponen impulsar una comisión investigadora. De todas formas, apuntó que primero conversarán sobre esta idea con los otros partidos de la oposición. El diputado de Unidad Popular, Eduardo Rubio, señaló que si se presenta una correcta “fundamentación, nosotros la acompañaríamos”. Más cauto fue el diputado colorado Walter Verri, quien aseguró que “hay que estudiar” la propuesta, aunque agregó que “es claro que el MI mintió” y que es una “vergüenza lo que está pasando”en el fútbol uruguayo, en particular, “la participación del Estado en este capítulo de la AUF”. Gallo consideró, a título personal, que la propuesta del Partido Nacional es “totalmente descabellada” y el objetivo principal es “hacer un circo”. Además, recalcó que el tema está siendo analizado por la Justicia y que no “tiene sentido” seguir “magnificándolo”.