El ex presidente Julio María Sanguinetti, posible precandidato del sector Batllistas, del Partido Colorado, estuvo el sábado en Punta del Este para presentar su libro sobre los 70 años de la creación del Estado de Israel (La trinchera de Occidente), en el salón de eventos del edificio Fendi Chateau. A la salida, fue consultado en una rueda de prensa por diversos temas, incluida la presencia de iglesias evangélicas en la política, que estuvo en el tapete por estos días gracias a la participación de la senadora y precandidata nacionalista Verónica Alonso en un evento religioso. En el acto la senadora dijo estar “convencida” de que “Dios tiene un propósito con esta nación y con nosotros acá”, y subrayó: “Así que nos va a ir muy bien, porque si Dios está con nosotros, ¿quién [está] contra nosotros?”.

Sanguinetti sostuvo que la ministra de Educación y Cultura, María Julia Muñoz, “se equivocó” cuando dijo que “los evangélicos son una plaga”, ya que “es una creencia tan respetable como cualquier otra”. Agregó que también se equivocan “aquellos diputados que dicen que van a optar en función de la ley de Dios”, ya que como diputados “tienen que actuar bajo las leyes de la república, y no de Dios”. Además, el ex presidente citó al arzobispo de Montevideo, Daniel Sturla, quien en declaraciones al semanario Búsqueda había señalado que el Uruguay “laico, plural y democrático es un bien para todos”, para luego subrayar que “aunque la línea pueda parecer sutil, que se mezcle a Dios directamente en una opción política determinada o que una iglesia apoye a un determinado partido, no es bueno”. Sanguinetti destacó las palabras de Sturla, con quien “ha discrepado tantas veces”, y concluyó que “las invocaciones a Dios no deben estar en la política”. “En la convicción de cada uno, lo manejará como pueda”, finalizó Sanguinetti, refiriéndose a la religión.