Un retrato de Eduardo Bleier se destacaba en la fachada de la Universidad de la República (Udelar). A la izquierda, un cartel gritaba: ¡Presente! A la derecha, otro reclamaba: “Nunca más terrorismo de Estado”. A sus pies, una avenida 18 de Julio colmada. Ayer, una multitud se concentró allí a homenajear y despedir los restos de Bleier, militante del Partido Comunista del Uruguay (PCU) que fue secuestrado mientras caminaba por la calle el 29 de octubre de 1975, trasladado hasta el centro clandestino de detención que funcionaba en una casona en Punta Gorda y posteriormente al llamado 300 Carlos, ubicado en las inmediaciones del Batallón 13. Bleier falleció, en una fecha estimada entre el 1º y el 5 de julio de 1976, como consecuencia de los apremios físicos y torturas a los que lo sometieron los militares.
Eran miles los rostros serios que observaban la fotografía desde abajo con los ojos llenos de una mezcla de tristeza y alivio. No faltaron las sonrisas ni las lágrimas. En el silencio se respiraba respeto y el firme reclamo por justicia y verdad. También rabia por las atrocidades cometidas durante la dictadura y el dolor por los que aún faltan. Esperaban a que llegaran las 12.00 y abrieran las puertas hacia la antesala del Paraninfo, donde, en una caja de madera solemne, resguardada e iluminada por ramos de flores, estaban los restos de Bleier, que fueron hallados en el ex Batallón 13 el 27 de agosto e identificados el 7 de octubre.
Una vez abierta la puerta, la multitud comenzó a moverse despacio para ingresar, pero la mayoría permaneció afuera. El presidente Tabaré Vázquez fue recibido por un largo aplauso e ingresó a la sede de la Facultad de Derecho acompañado de la fórmula presidencial del Frente Amplio (FA), Daniel Martínez y Graciela VIllar, que había llegado minutos antes. Dentro se encontraron con la familia Bleier y el coordinador del Grupo de Verdad y Justicia (GVJ), Felipe Michelini. Dispuestos en una especie de círculo, entonaron las estrofas del Himno Nacional.
“Nos encontramos esta mañana para honrar, homenajear y despedir los restos de quien fuera Eduardo Bleier, odontólogo de profesión, esposo, padre de cuatro hijos”, leyó Michelini. En una carta dirigida a todos los presentes y al propio Bleier, Michelini recordó su trayectoria, sus compromisos con el PCU y su lucha por la justicia. “La búsqueda [de desaparecidos] debe ser entendida como una causa sagrada de todos los uruguayos”, prosiguió el coordinador, y planteó que “no ha sido fácil conocer la verdad; perversamente no la dicen o mienten, pero no pueden hacer callar a la tierra”. “Eduardo, te buscamos siempre. Rosa [su esposa] y Elena [su hermana] movieron cielo y tierra para ubicar tu paradero. Bienvenido a casa, descansa en paz. Nunca te fuiste, siempre has estado y seguirás viviendo en tus nietos, en nuestro corazón y en nuestra lucha”, concluyó Michelini entre lágrimas.
El presidente y la fórmula oficialista se retiraron sin hacer declaraciones. Vázquez únicamente manifestó que hacía suyas las palabras de Michelini. El candidato del FA publicó después en su cuenta de Twitter: “La democracia fue fracturada y también los derechos humanos. Los familiares y la sociedad siguieron buscando y hoy con dolor se confirma el ocultamiento. Querido Gerardo Bleier, somos miles los que estamos contigo, con una serena paz. Seguiremos la búsqueda por verdad y justicia”.
Javier Tassino, integrante de la organización Madres y Familiares de Uruguayos Detenidos Desaparecidos, dijo a la prensa que con el hallazgo “dimos un paso importante”. “Es para nosotros muy significativo y conmovedor, se cruzan muchos sentimientos y nos inspira a seguir buscando”, agregó. Planteó la necesidad de “seguir desarrollando la memoria sin odio y sin rencores”, y de “profundizar la democracia”. “La democracia trae la paz, trae el beneficio para la gente y prosperidad”, expresó.
Tassino anunció que se iniciará una intervención en el ex centro de reclusión La Tablada, ubicado en Camino Melilla, que ya está autorizada por la Justicia. Manifestó que continúan los trabajos de búsqueda en el Batallón de Infantería Paracaidista 14, en Toledo, que comenzaron el miércoles 9 de octubre. Además, siguen las excavaciones en el Batallón 13, que se vieron interrumpidas el fin de semana por las intensas lluvias.
En diálogo con la prensa, el ministro de Defensa Nacional, José Bayardi, confirmó que por el momento no hay novedades sobre las excavaciones en el Batallón 14. El ministro dijo que “por suerte” se le ha podido dar respuesta a una familia, pero “quedan todavía un número muy importante de familias” que buscan a sus familiares. “Ese debería ser un compromiso del conjunto de la sociedad”, agregó. Según dijo, hallar los restos no hubiera sido posible de no ser por los gobiernos del FA. Además, sostuvo que es una “canallada incalificable” que dirigentes políticos de la oposición vinculen este hecho con una estrategia política. “Los que están sosteniendo esto no sólo no hicieron nada, sino que, en algún caso, hasta ocultaron. Estoy refiriéndome a Cabildo Abierto y particularmente a [Guido] Manini [Rios]”.
Además de Bayardi, estuvieron presentes el ex presidente José Mujica, la vicepresidenta Lucía Topolansky, los ex precandidatos Óscar Andrade, Carolina Cosse y Mario Bergara, el presidente del FA, Javier Miranda, entre otros dirigentes de la coalición de izquierda. También asistieron integrantes de movimientos sociales y la central obrera PIT-CNT. Además de Martínez, asistió el candidato del Partido Independiente, Pablo Mieres, junto a su compañera de fórmula, Mónica Bottero.
“Aparte de la monstruosidad atrás de esto, lo que más duele es la mentira”, dijo Mujica a la prensa antes de retirarse del homenaje. “Siempre faltan cosas por hacer, hay mucho secreto. Yo estoy convencido de que hay pactos de silencio. Se dice que hay gente del gobierno porque la gente se manijea, no entienden lo que es el funcionamiento de una corporación”, sentenció el ex presidente, según recogió Teledoce. El ex presidente aseguró que el gobierno jamás alimentó un pacto de silencio y sostuvo que este se establece entre generales, lo que explica que los pocos datos que llegan provienen de ex soldados.
Diez minutos antes de las 15.00, la puerta de la Udelar se cerró, y minutos después la multitud se abrió para ver pasar el cortejo que trasladaba los restos de Bleier entre un aplauso sostenido durante un buen rato. En un lapso de silencio, Gerardo Bleier gritó: “Gracias a todos compañeros”, y se despidió para trasladarse con su familia al sepelio. Los restos de Bleier descansan ahora junto a los de su esposa.