A las 20.00 empezó ayer el acto de cierre de campaña del Partido Nacional (PN) en la ciudad de Las Piedras. El acto se hizo sobre la avenida Artigas, en la circunvalación de la plaza José Batlle y Ordóñez. La calle angosta estaba repleta de militantes de los partidos de la coalición, por lo que resultaba casi imposible ver el escenario. En la mitad de la cuadra había una pantalla gigante en la que se podía seguir las palabras de la fórmula integrada por Luis Lacalle Pou y Beatriz Argimón. Adelante, detrás de un primer vallado, se ubicaron los dirigentes partidarios, entre los que se destacaron el ex presidente Julio María Sanguinetti y la viuda de Jorge Batlle, Mercedes Menafra.
Antes de que apareciera la fórmula, subieron al escenario los representantes de la coalición. El primero en ser presentado fue el líder del Partido de la Gente (PG), Edgardo Novick; después subió el actual senador del Partido Independiente, Pablo Mieres, que fue seguido por el senador electo y ex candidato del Partido Colorado Ernesto Talvi. Quien no estuvo presente fue el ex comandante en jefe del Ejército, Guido Manini Ríos, pero en su lugar asistió su esposa, la senadora electa Irene Moreira.
“Quebrar la impunidad”
El discurso de Lacalle Pou no tuvo grandes sorpresas. Dijo que la coalición no es “un sistema cerrado”, sino un conjunto de “hombres y mujeres con distinta tradición e historia” que se juntaron no sólo para ganar una elección, sino para gobernar. Aseguró que el 27 de octubre el mensaje del pueblo fue “sacudirle la modorra al gobierno” y, por medio de las urnas, expresar que quiere “un gobierno de muchas verdades, tolerante, que no haga de la diversidad un discurso, sino la práctica diaria”. Además, reivindicó el uso de las banderas partidarias para demostrar la unión de la coalición; cuando dijo que las banderas se veían lindas desde arriba, la gente empezó a cantar: “Uruguay, Uruguay” y varias personas gritaron: “Viva la democracia”.
Sobre el candidato del Frente Amplio (FA), Daniel Martínez, reiteró que miente al decir que de ganar el PN se podría reiterar una crisis como la de 2002. Lacalle Pou advirtió a sus militantes que no caigan en “triunfalismos”, porque “no está todo el pescado vendido”. Afirmó que el lunes 25 va a ir a la Torre Ejecutiva y que espera que el presidente, Tabaré Vázquez, “abra toda la información” para empezar la transición. “Guambia que no es cacería de brujas, pero si alguien la macaneó, que vaya a la Justicia”, dijo.
Sobre la seguridad, expresó que no se resigna a que Uruguay se vuelva más violento: “Lo que hay que quebrar es la impunidad con la que se maneja la delincuencia”, afirmó. Agregó que si gana la elección va a ser un presidente para todos, “no de un partido ni de una coalición”. “Por primera vez en la historia nacional cinco partidos encontraron las coincidencias, trazaron una hoja de ruta, rumbo a ser gobierno juntos [...]. Estamos convencidos de que vale la pena; dentro de cinco años espero que en estos colores esté el próximo presidente de la República, después veremos cuál. No hay apuro: primero tenemos que hacer, y tenemos que hacer mucho”, dijo.
Durante los 45 minutos que duró el discurso de Lacalle Pou, varias personas se desmayaron por la falta de aire, incluso el candidato tuvo que levantar a una señora que se desvaneció frente a él cuando bajó a saludar.
Gran responsabilidad
Antes de que iniciara el acto, Novick dijo a la prensa que su partido se está preparando para las elecciones departamentales de mayo. “En estos años yo he peleado para hacer la famosa Concertación, porque la gente nos decía que nos juntáramos. Después del domingo vamos a hablar sobre ese tema”, afirmó. De todas formas, no se puede presentar un candidato por la Concertación, como sucedió en las elecciones de 2015, porque el partido no alcanzó los votos necesarios en las internas para conformar su convención. “Ya dijimos que ponemos el lema del PG y si no, que sea por otro partido; lo importante es votar juntos”, señaló. Por su parte, Sanguinetti dijo que vio a Lacalle Pou “firme y optimista”. Estimó que el debate lo puso “a las puertas de la presidencia”. “La gente encuentra un eco [en él]. Estamos en camino de un cambio sólido y esperanzado. Las situaciones van cambiando; hoy son cinco partidos, es un desafío mayor, pero también pone gran responsabilidad en todos. Como lo dijo muy bien mi colega [José] Mujica, todos vamos a tener una gran responsabilidad”, concluyó.