En noviembre del año pasado Juan Sartori inició una campaña de expectativa, en diciembre oficializó su precandidatura a la presidencia de la República por el Partido Nacional (PN), y en marzo de este año lanzó su campaña en el Palacio Peñarol, prometiendo crear 100.000 empleos, quitar el Impuesto de Asistencia a la Seguridad Social y bajar el precio de los combustibles. Desde el principio Sartori tuvo el apoyo del ex legislador Alem García (Todo por el Pueblo), luego se le fueron sumando dirigentes menores, y ayer logró la incorporación más importante hasta ahora: la de la senadora Verónica Alonso (Esperanza Nacional), quien dejó sin efecto su propia precandidatura.

Alonso reconoció ayer, en una conferencia de prensa junto al magnate, que el año pasado no conocía al magnate, y alegó que por eso tuvo un “natural desconcierto”. “Pero en estos meses lo conocí, y ahora sé que es un buen uruguayo y un buen blanco”, aseguró.

El domingo, el intendente de Maldonado, Enrique Antía, también precandidato (por Mejor País), dijo a Telenoche que había recibido “presiones fuertes” para que abandonara su campaña y se sumara a la del empresario. Esto fue negado por García, quien dijo que él habló con Antía y que lo hizo en términos cordiales.

Por su parte, Sartori aseguró que no está enfocado en las críticas ni en las campañas de los otros precandidatos. “Lo único que me importa es mi trabajo y mi campaña”, afirmó. Sostuvo que lo une a Alonso la preocupación por los grandes temas del país, como el trabajo y la seguridad. “Hay una cantidad de otros temas, pero mi compromiso es el de atacar los problemas prioritarios [...]. Mi movimiento es amplio, hay distintas opiniones sobre cantidad de temas, y eso no va a afectar la visión que yo tengo de cada uno de esos temas. Vamos a trabajar en las coincidencias y no en las diferencias”, aseguró, en probable alusión a algunas posiciones de la senadora sobre la llamada “agenda de derechos”.

El diputado Pablo Abdala (Alianza Nacional) aseguró a la diaria que sigue sin conocer a Sartori, y que mantiene la opinión de que su precandidatura es “enigmática”. “Hace 35 años que milito en el partido, y no es que para ser candidato sea necesario conocerme a mí, pero evidentemente él es poco o nada conocido a nivel de la estructura partidaria”, señaló. La diputada Graciela Bianchi (Todos) prefirió no hacer valoraciones sobre la decisión de Alonso, y dijo que tiene “su legítimo derecho a bajarse de la candidatura”.

Tribunal de Honor: PN culpa a Vázquez

El Directorio del Partido Nacional declaró ayer en un comunicado que el presidente Tabaré Vázquez es “responsable del desencadenamiento de los hechos que afectaron al Ejército Nacional”. Afirmó que fue “de extrema gravedad” la demora del Poder Ejecutivo en presentar la denuncia ante la Justicia por las confesiones ante un tribunal de honor del Ejército del “reconocido torturador” José Nino Gavazzo.

“Las explicaciones ensayadas respecto del tema no resultan claras y no se ha sancionado a quienes obraron sin el diligenciamiento debido, lo que incluye al comandante en fefe del Ejército del momento [Guido Manini Ríos] en el que ocurrieron los episodios”, añade el comunicado.