Ayer, 69 días antes de las elecciones internas tuvo lugar la primera reunión formal entre dirigentes blancos y colorados para estudiar la posibilidad de revitalizar el Partido de la Concertación (PdlC), la herramienta que les permitió a ambos partidos acumular votos en las elecciones departamentales de Montevideo en mayo de 2015 y ganar dos de los ocho municipios de la capital, aunque también los llevó a parir al hoy precandidato presidencial del Partido de la Gente Edgardo Novick, quien en los últimos años se ha encargado de arrebatarles senadores, diputados y ediles de todas partes del país.

“Lo que nosotros queremos presentar es una propuesta superadora para el gobierno departamental y centrarnos en eso”, dijo el diputado y ex secretario general del Partido Colorado Adrián Peña tras el encuentro, realizado en la sede del Partido Nacional (PN).

La aprobación del PdlC tendrá que hacerse especialmente rápido en ambos partidos si es que aspiran a reeditar la alianza, en la medida que el plazo para presentar las listas a la Corte Electoral vence el 31 de mayo. Como está expresamente prohibido a los candidatos participar en las elecciones internas por un partido y en alguna de las otras instancias electorales por otro, aquellos postulantes (ya sea a intendente, a edil, a alcalde o a concejal) que quieran ser candidatos dentro de la coalición no deberán aparecer en una lista de las próximas elecciones internas por su partido fundacional. Esto, sumado a la necesidad de asegurarse que el PdlC tenga al menos 500 votos en junio, y de que este partido tendrá que presentar sus propios candidatos para las internas (tanto a presidente como sus convencionales), son los principales escollos formales que tiene la coalición.

“Vamos a ponernos en contacto primero con los líderes partidarios de todos los sectores y seguir avanzando en concretar una definición que, vuelvo a decir, tiene que ver con los tiempos que no sólo la ley determina, sino también de compañeros que quieren comparecer en esa instancia y tienen que saber cómo proceder en ese sentido”, dijo la presidenta del directorio nacionalista, Beatriz Argimón, tras el encuentro.

Si bien el lunes el diputado nacionalista Gustavo Penadés había dicho a la diaria en la previa del encuentro que lo que se buscaba era simplemente realizar los trámites para “mantener viva” la herramienta de la Concertación, ayer su par Pablo Abdala, uno de los participantes del encuentro, sostuvo que a su entender la definición a tomarse en el próximo mes debería implicar una decisión final sobre el tema. “Se hace o no se hace, porque preservar el instrumento implica un replanteo de la estrategia electoral”, expresó. Abdala dijo que el tema se analizará el lunes en el directorio y prefirió no adelantar una opinión acerca de la conveniencia de realizar esta alianza, aunque recordó que él estuvo de acuerdo con que se hiciera en 2015 y que considera que el balance no ha sido negativo. Pero ni su sector, Alianza Nacional, ni su precandidato presidencial, Jorge Larrañaga, se han expresado al respecto y, de hecho, quien está siendo por entonces más crítico de reeditar el acuerdo es una figura muy cercana al senador nacionalista, el diputado Jorge Gandini. Ayer este legislador volvió a argumentar en contra de la coalición, y recordó que “faltan 30 días para presentar un partido político que no funciona desde hace cinco años”. “Se acordaron tarde, y a mi juicio la decisión es inoportuna. Así no se gana una elección. Se requieren procesos constructivos más largos, constructivos y vocacionales, y pensando en Montevideo, no en los políticos”, sostuvo.