“Por ahora no hay ningún planteo al respecto”, dijo ayer el ministro de Economía y Finanzas, Danilo Astori, al ser consultado sobre la posibilidad de que el gobierno vaya a derogar el decreto de ocupación de los lugares de trabajo; de todas formas, aseguró que “no sería bueno para Uruguay ingresar en esa lista” negra de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).

En 2009 las cámaras empresariales habían presentado una queja ante la OIT, pero recién en mayo de este año Uruguay quedó en la antesala de la lista de países que no respetan los convenios internacionales de trabajo. Los empresarios se quejan, entre otras cosas, del Decreto 165 de 2006, que regula el derecho de huelga, la libertad sindical y la ley de negociación colectiva. En especial critican que el articulado reconoce las ocupaciones como una “modalidad de ejercicio del derecho de huelga”. El 10 de junio la OIT dará a conocer la lista de los 24 países de esta lista.

Además de las cámaras empresariales, UPM le hizo saber al gobierno que es necesario contar con una normativa laboral que regule las ocupaciones y piquetes. En el acuerdo marco firmado entre ambas partes en noviembre de 2017, se convocaba al ámbito de negociación conjunta “con el objeto de acordar la implementación de Procedimientos de Prevención y Solución de Conflictos, así como la regulación de Piquetes y Ocupaciones”.

En tanto, Astori cuestionó en rueda de prensa los reclamos de la Confederación de Cámaras Empresariales y sostuvo que sus planteos tienen “una similitud muy grande” con los que ha venido haciendo Un Solo Uruguay, y expresó que discrepa con estos, que tienen “enfoques muy diferentes a los del gobierno”. Si bien dijo que se pueden encontrar coincidencias puntuales como “la necesidad de mejorar el gasto público” y el déficit fiscal, expresó que discrepa con que es necesario lograr niveles de competitividad “con tipo de cambio alto y salarios bajos”. Según dijo, se trata de un “enfoque antiguo que no tiene el gobierno”. En cambio, la actual administración, aseguró, “cree más en el logro de niveles de competitividad y eficiencia mejores a los actuales por la vía de la innovación e incorporación de conocimiento, y por eso hay que darles mucha importancia a la educación, la ciencia y la tecnología”.

Apuntes sobre la lista negra

El precandidato del Frente Amplio Óscar Andrade dijo a la diaria que la discusión sobre el ingreso a la lista negra se está centrando en la discusión del decreto de las ocupaciones, cuando hay otros aspectos más importantes en el mundo laboral. Además, aseguró que en Uruguay hay miles de negociaciones, y la medida de ocupación se toma de manera extraordinaria.

Sobre la posibilidad de entrar en la “lista negra”, dijo que se trata de una forma de “chantaje general”. Se preguntó: “¿Por qué no va Paraguay, que tiene ocho de cada diez trabajadores sin aportes a la seguridad social? ¿Por qué no va Argentina, que autorizó el trabajo desde los diez años en Jujuy el año pasado, a pedido de las tabacaleras? La OIT no es Dios, está conformada por patrones y por gobiernos que hoy son la mayoría de derecha”.

Desde la oposición, el precandidato del Partido Independiente Pablo Mieres dijo que es “un grave error que el gobierno exponga al país a caer la lista de negra de la OIT”. Sostuvo que en caso de acceder al gobierno, derogará la actual normativa que habilita las ocupaciones.