El intendente de Montevideo, Christian Di Candia, desarrolló su idea de que la Intendencia de Montevideo (IM) recupere el predio de la Expo Prado, que actualmente y desde hace “más de 100 años” está bajo control de la Asociación Rural del Uruguay (ARU). El jerarca departamental aseguró este martes en una entrevista con Radio Montecarlo que “nunca hubo concesión” ni “convenio”, pero sí una norma que atribuye tanto el predio como los galpones a la IM. Por eso, el intendente sostuvo que no se trata de “recuperar” el terreno, sino de “retomar el control”, pero adelantó que “acá nadie saca a nadie del predio”, ya que “estas cosas se negocian”.

De hecho, recordó que cuando se desempeñó como prosecretario de la IM se mantuvieron conversaciones con la ARU a estos efectos. Además, contó que está hablando con quien lo sustituyó en ese cargo, Juan Canessa, y con el coordinador institucional de la IM, Jorge Rodríguez, “para sentarnos con la ARU y poder conversar”.

Consultado por la diaria, el presidente de la ARU, Gabriel Capurro, manifestó su apoyo a esta eventual negociación y aseguró que desde la asociación que dirige están “abiertos a conversar” y buscar resultados que sean “buenos para ambos”. Capurro reconoció que la ARU tiene algunos problemas con el mantenimiento y el deterioro de los galpones, que consideró –al igual que el intendente– “muy caros”. En febrero de 2017 la ARU había enviado a seguro de paro a “varios empleados de mantenimiento” que estaban “sobrando”. El presidente de la ARU confirmó los contactos que mencionó Di Candia y agregó que ambas instituciones mantienen, además, una “buena relación”.

Di Candia busca que esta negociación resulte en un acuerdo “win-win”, ya que, según dijo, “se pueden buscar formatos que permitan a la ARU seguir desarrollando la Expo Prado, a nosotros hacer la Criolla y, además, expandir un proyecto de polo cultural”. Sobre este último proyecto, el intendente imaginó “coworks públicos, centros culturales, cafeterías, cervecerías, salas de ensayo”, y no descartó –aunque aclaró que se trata de una idea personal– mudar el Departamento de Cultura de la IM.

Capurro, por su parte, se mostró interesado en el proyecto y comentó que, por el lado de la ARU, se iniciaron contactos con la Feria de Barcelona (FB). Hizo hincapié en que la IM está al tanto de esta iniciativa y adelantó algunas de las propuestas que podrían recibirse desde la FB, como restaurantes o cines.

A pesar de que la IM y la ARU parecen coincidir respecto de algunos aspectos del futuro del predio, como la propiedad, la negociación y los objetivos a futuro, queda una duda sobre cómo se resolvería legalmente el usufructo del terreno en cuestión: mientras que Di Candia negó la existencia de concesiones, Capurro citó una ley de 1909 y un decreto reglamentario de 1912, por los que “se le dio el usufructo del predio a la ARU”.