“No vengo a pedir, vengo a traer soluciones”, dijo el ministro de Transporte y Obras Públicas designado, Luis Alberto Heber, en la sede de Todos, a la salida de un encuentro con su futura compañera de gabinete Azucena Arbeleche, quien será la titular del Ministerio de Economía y Finanzas.
El nacionalista dijo que planea conseguir con “innovación” e “imaginación” recursos “que no sean estrictamente presupuestales”, respetando la meta de “no poner impuestos”. Recordó que el gobierno planea achicar el gasto público en más de 900 millones de dólares, y, en ese marco, dijo que es necesario ir “teniendo presente” que “el que usa, paga”.
Frases parecidas utilizaron el actual presidente, Tabaré Vázquez, y el ex mandatario José Mujica al inicio de sus administraciones. Durante un encuentro con los intendentes en mayo de 2016, Vázquez planteó la posibilidad de que los camiones del sector productivo financien directamente el mantenimiento de la caminería rural. “El que rompe, paga”, repitió durante la reunión, según consignaba en aquel entonces El Observador, negando que pudiera haber más recursos presupuestales que los que estaban previstos para ese rubro. Meses después el actual ministro de Transporte, Víctor Rossi, fue más escéptico con esa frase. “Prefiero no facilitar tantos títulos y trabajar para cumplir ciertos objetivos”, sostuvo en una entrevista con El País.
La frase había comenzado a utilizarse durante el gobierno de Mujica, cinco años antes de que Vázquez se la apropiara. El ahora electo senador quería implementar un sistema de tasas basado en esa lógica para el mantenimiento de las rutas nacionales, pero tuvo la oposición del por entonces vicepresidente Danilo Astori.
Este miércoles, Heber coincidió con Mujica y Vázquez en que “el que rompe obviamente tiene que pagar”, pero puntualizó que lo que él quiere es que “el que usa, paga”: “Lo más lógico es que quienes usan las rutas puedan ayudarnos a financiar, aunque sea a largo plazo, la posibilidad de tener recursos para poder tener las rutas que el país precisa”.
Una posibilidad, explicaron desde el futuro Ejecutivo, pasaría por aplicar costos diferenciales en el mantenimiento de las rutas en función de los usos de cada sector, pero todavía no se ha definido de qué forma podría aplicarse esta medida.