El canciller, Ernesto Talvi, clarificó este viernes por qué no quiere a Julio Luis Sanguinetti, el hijo del senador y ex presidente Julio María Sanguinetti, como delegado de la Comisión Administradora del Río Uruguay (CARU), que depende de Cancillería. En una rueda de prensa, contestó que “es una política sana que familiares de líderes políticos no integren los órganos de Cancillería”. Aclaró que la definición “no es un tema personal” sobre Sanguinetti, y dijo que espera que se “respete” su decisión. También sostuvo que hasta el momento “no hay ningún nombre ni ninguna designación para las que Cancillería tenga responsabilidad, como las embajadas, Uruguay XXI y las comisiones binacionales”.

Esta confirmación por parte de Talvi trajo revuelo al instante en la interna del Partido Colorado (PC), hasta el punto de que la cuenta de Twitter del sector Batllistas –liderado por Sanguinetti– creó el hashtag “#serhijonoesdelito”. El ex diputado del PC Tabaré Viera, mano derecha de Sanguinetti padre –y su suplente en el Senado–, escribió en Twitter que los cargos en comisiones internacionales “nunca fueron designados por Cancillería”, por lo que se trata de un “inadmisible manoseo”. A su vez, el dirigente Gustavo Osta, también del sanguinettismo, escribió en Twitter que Talvi “abre un frente de conflicto que complica al PC y al gobierno”. Agregó que Batllistas propone a Julio Luis Sanguinetti “por sus aptitudes políticas, profesionales y personales”, y que “no es democrático plantear proscribir a un ciudadano por el hecho de que su padre sea líder político”.

“No es un invento”

Osta dijo a la diaria que un gobierno de coalición se conforma con acuerdos entre sectores, y en función de eso “se van distribuyendo las responsabilidades en el Estado, por partido y por sectores”. “Dentro de esa lista de organismos donde se nombran responsabilidades, que son nombramientos políticos con base en un criterio de confianza, hay posiciones, y si en esas posiciones tenemos un candidato adecuado para eso, lo proponemos. Lo que importa es la legitimidad política, personal y técnica, las aptitudes que tenga ese candidato y el respaldo de un sector y un partido que conforman el gobierno”, subrayó. Además, aclaró que a Julio Luis Sanguinetti no lo propone su padre sino su sector, Batllistas, “que tiene dos senadores”, al igual que Ciudadanos, la agrupación de Talvi. “A no confundir los tantos, porque acá no estamos hablando de quién tiene la mayoría en un partido, en la Convención [Nacional]; eso es otro análisis”, señaló.

Osta se mantiene en la postura de que a Julio Luis Sanguinetti lo están “proscribiendo”, porque “la ley es lo que rige el funcionamiento del Estado”, y en la medida en que no existe ninguna disposición que lo prohíba se le está “limitando la posibilidad de ejercer un cargo en el gobierno por el solo hecho de ser familiar de un líder político; es una limitación con origen en la sangre”.

El dirigente agregó que quienes critican la posible designación del hijo de Sanguinetti para ese cargo ven que lo “beneficia” su parentesco, pero aseguró que en Batllistas piensan justamente al revés, ya que ser hijo del ex presidente “lo limita”, y eso “no es democrático y hasta poco republicano”. “Nosotros esperamos que esto logre retomar un cauce natural. Pensamos que hay que actuar con más prudencia; a pocos días de asumir el gobierno hay que demostrar seriedad”, señaló. Además, subrayó que la posible designación del hijo de Sanguinetti “no es un invento”, ya que, por ejemplo, en el año 2000 el entonces presidente, Jorge Batlle –a quien Talvi considera su referente, recordó–, nombró a José Luis Batlle, su primo, “casi un hermano, de súper confianza”, para presidir la Comisión Técnica Mixta de Salto Grande. “¿Y a quién le pareció mal? A nadie, porque tenía las capacidades personales, técnicas y políticas y era un hombre de confianza del presidente. La confianza política es lo que le da funcionamiento al Estado, porque si no deberíamos ir a un sistema de llamado a concurso”, agregó.

Osta sostuvo que Batllistas mantiene el planteo de que Julio Luis Sanguinetti sea delegado de la CARU, y considera que “lo que se ha visto en las redes en estos días generó un conflicto interno”. “¿Tenemos derecho a complicarle el gobierno a la coalición? ¿Eso es lo que la gente espera de nosotros, discutir estas cosas?”, se preguntó.