La historia de la negociación finalmente trunca entre Ancap y la firma árabe Pure Life General Trending duró unos siete meses, enfocada en la venta de la subsidiaria argentina Carboclor —Ancap tiene 84% a través de la firma Ancsol, y el resto son acciones que cotizan en la Bolsa de Buenos Aires—, dedicada al rubro petroquímico y que inició una reestructura en 2018 tras generar pérdidas por varios años. Tanto la pasada administración de la petrolera estatal como la actual consideran un riesgo innecesario mantener esta inversión y promovieron su venta.

En mayo del año pasado el grupo árabe acercó una oferta al Ministerio de Industria, Energía y Minería (MIEM) que resultó llamativa por el monto: 45 millones de dólares. Esto superaba el valor de mercado estimado para los activos de Carboclor, pero se entendió que el interés principal venía por el puerto que posee la empresa en la ciudad de Campana, sobre el río Paraná. El ministro de Industria, Omar Paganini, dijo a la diaria que la oferta “parecía interesante por el precio y la oportunidad de vender una unidad que no es estratégica para Ancap”, por lo que trasladó el asunto al ente, que comenzó “los chequeos y revisiones” sobre los oferentes.

Según dio cuenta el semanario Búsqueda, tras los contactos iniciales el 19 de agosto el ministro envió una comunicación al directorio de Ancap solicitando emitir una carta de aceptación condicional a favor de Pure Life. En diálogo con la diaria, el director de Ancap en representación del Frente Amplio (FA), Walter Sosa, cuestionó esto: “No era lo adecuado. Esa carta la podía usar Pure Life para salir a conseguir crédito, cuando lo que debía hacer era demostrar que disponía de los fondos y el origen lícito”. Paganini sostuvo que “siempre se habló de estudiar [la oferta] de forma condicionada a los antecedentes del comprador”.

La historia continuó con la apertura de un llamado a interesados en Carboclor, que según Sosa “tomó por válida” la oferta de los árabes, ya que la condición era superar los 45 millones de dólares ofrecidos. Nadie se presentó y siguió adelante la negociación con Pure Life, aunque tanto el representante del FA como el de Cabildo Abierto (CA) en el directorio —el cargo lo ocupó interinamente hasta diciembre Enrique Pees Boz— expresaron sus reparos, informó en diciembre el semanario Brecha.

Tras constatar varios inconvenientes en las diligencias realizadas en busca de información sobre el grupo árabe, este miércoles Ancap comunicó la finalización de la negociación y el rechazo a la oferta, a siete meses de iniciados los contactos. En un comunicado, explicó que la decisión se basa en “un extenso y exhaustivo análisis de antecedentes del oferente Pure Life General Trading y del debido origen de fondos que resultó insatisfactorio”.

La petrolera detalló: “Ante la constatación de la falta de capacidad financiera y de antecedentes del oferente, se le exigió la identificación de quien financiaría la operación, junto con una prueba de fondos y de su origen”. La respuesta a estas exigencias llegó el 31 de diciembre, por fuera del plazo establecido entre las partes, y “alude a una nueva empresa con fondos en el Bank of Shanghai que intervendría en la operación”, lo cual no fue corroborado por esa institución financiera.

Este jueves Búsqueda publicó parte de los informes enviados a Ancap en los últimos meses por el estudio local Brum Costa y la firma internacional Kroll, con advertencias varias y sospechas sobre Pure Life. Pese a esto, según indicó el semanario, el presidente de Ancap, Alejandro Stipanicic, insistió en varias ocasiones para concretar la venta: “De seguir dilatando nuestra decisión podemos perder la oferta y no concretar la salida de Argentina”, escribió en un mail enviado al resto del directorio el 19 de noviembre.

A modo de evaluación de lo ocurrido, el ministro de Industria manifestó que “el proceso fue sumamente transparente y claro, aunque lamentablemente el negocio se frustró, pero no hay ningún problema ni perjuicio para el Estado”. De forma distinta opinó el director de Ancap en representación del FA, para quien “el proceso fue bastante desordenado”.

En ese sentido, Sosa declaró: “Pure Life primero presentó como soporte financiero a una empresa petrolera árabe que dijo desconocer el negocio, después presentaron a un jeque integrante de una de las familias reales de Emiratos Árabes Unidos [Shaikh Jamal Salem Mohammed Nasser al Qasimi, jeque de Ajman] pero tampoco tuvimos credenciales que lo autentificaran. Después hablaron de que iban a utilizar un banco de Dubái y luego cambiaron por el banco de Shanghái, pero no lograron mostrar que disponían de los fondos”.

El director opositor sostuvo: “Lamentablemente la transacción se frustró, pero nos da la razón a los que hablamos de que era un proceso llamativo e irregular”. Además, dijo que es “el ministro quien debe aclarar la situación”, porque fue quien “impulsó la operación”.

Consultado sobre el futuro de Carboclor, Paganini dijo que se esperará “a ver cómo reacciona el mercado”. “Quedamos a la expectativa y si aparece alguna oferta la estudiaremos”, sostuvo. Añadió que el arrendamiento de parte de las instalaciones de la firma en Argentina “equilibró” los números y “se puede esperar”.