En pocos días, la discusión entre la intendencia frenteamplista de Canelones y los dirigentes blancos y colorados por la votación de un fideicomiso para obras tomó estado nacional y, tras la fallida votación del martes de noche, generó fuertes cruces entre dirigentes del gobierno y del Frente Amplio (FA). De las acusaciones contra el secretario de Presidencia, Álvaro Delgado, de “presionar” a ediles para que no votaran el plan del intendente canario Yamandú Orsi se pasó a una escalada que incluye menciones a la grieta política y la vuelta de “viejas prácticas”, según el FA. En respuesta, el intendente de Rocha, Alejo Umpiérrez, del Partido Nacional (PN), dijo que también hubo presiones a ediles por parte del FA para que no votaran un fideicomiso que promovía para el departamento.

La cuestión que subyace a lo ocurrido en Canelones es que las intendencias blancas de Rocha y Río Negro también pretendieron aprobar fideicomisos para obras y no contaron con el apoyo del FA en lo departamental. Según supo la diaria en base a fuentes del FA, en las conversaciones previas a la votación del fideicomiso hubo gestiones de Orsi para abrir “un canal de diálogo” en los otros departamentos en busca de acuerdos, pero el jefe comunal aclaró que no podía garantizar apoyos porque son realidades locales distintas.

Este jueves Umpiérrez y su par de Río Negro, Omar Lafluf, convocaron a una conferencia de prensa en el Parlamento, en la que defendieron la actuación de Delgado como negociador, luego de que el miércoles Orsi afirmara que hubo una intervención “directa” de figuras del gobierno en Canelones y que se ejercieron presiones “inéditas” a los ediles. Tanto el secretario de Presidencia como el ministro de Ambiente, Daniel Peña, negaron estas acusaciones.

Peña tuvo un rol clave en lo ocurrido porque fue quien ofició de nexo entre el Poder Ejecutivo y los dirigentes colorados en busca de que la coalición –los tres sectores del PN con representación en la Junta Departamental canaria y el único edil del Partido Colorado (PC)– votara alineada. Esto fue así porque en los días previos dirigentes colorados de Canelones, del sector Batllistas –Peña pertenece a Ciudadanos–, se mostraron proclives a votar el fideicomiso.

El secretario general de la intendencia canaria, Francisco Legnani, dijo a la diaria que los argumentos dados por los ediles de la oposición –así como las declaraciones que Delgado y Peña hicieron el miércoles– para rechazar el fideicomiso “no son de recibo”. Por un lado, descartó los temores relacionados con el nivel de endeudamiento: un informe de una calificadora plantea que los riesgos son “casi nulos” porque están garantizados los pagos con parte de la contribución inmobiliaria. Tampoco estuvo de acuerdo en que no hubiera control sobre el gasto en obras que se realice, porque la intendencia aceptó un pedido del PC de crear una comisión de seguimiento.

Legnani destacó que el PC a nivel departamental, así como “parte del PN”, trabajaron en conjunto con la intendencia para aprobar el fideicomiso mediante diálogo y negociaciones, pero a última hora llegaron “presiones” desde Presidencia para no respaldarlo. “No estábamos acostumbrados a este tipo de prácticas, aunque no nos sorprende. Así actuó el gobierno nacional entre 1990 y 2005 cuando el FA gobernaba Montevideo y se intentó asfixiarlo [por parte del Ejecutivo integrado por blancos y colorados]. Desde 2005 el FA trabajó mancomunadamente con las 19 intendencias; esas viejas prácticas las volvemos a ver ahora con la injerencia de Presidencia en Canelones”, agregó el secretario general de la comuna canaria.

Por su parte, el expresidente José Mujica –del Movimiento de Participación Popular, al igual que Orsi– lamentó en su audición radial en M24 que no se votara el fideicomiso para obras en Canelones “porque hubo presiones”, y calificó lo ocurrido de “triste”. “En Uruguay, no haciendo política sino politiquería, hay desesperación, y en realidad están trabajando para generar una grieta del tipo de la argentina”, señaló. Mujica agregó que esta forma de actuar “persigue una finalidad de largo o mediano plazo desde el punto de vista político: se castiga a la gente buscando conveniencia política; es el Uruguay que tenemos y en el cual vivimos”.

“Es destemplada la reacción” de Orsi

Delgado y Peña respondieron al FA en entrevistas radiales. El secretario de Presidencia dijo que las acusaciones de presiones a ediles para que votaran en bloque contra el fideicomiso en Canelones son “falsas e inaceptables”. En la radio Universal sostuvo que hay que “desdramatizar” la situación y buscar alternativas para la realización de obras en el departamento. “En Canelones era el décimo fideicomiso que se intentaba aprobar, tiene un endeudamiento de 370 o 380 millones de dólares, todavía con temas pendientes del fideicomiso anterior”, expresó Delgado. Señaló que a raíz de sus conversaciones con ediles veía que el fideicomiso tenía “grandes inconsistencias”, como aspectos relacionados con “la forma de presentación” y “algunas cosas no definidas”.

El ministro de Ambiente se refirió a las acusaciones de Orsi en Informativo Sarandí. “Me parece que es destemplada la reacción y alguna acusación, un poco temeraria”, manifestó. Rechazó que la negativa a votar fuera “por cuestiones electorales; es como decir que cada cosa que no votó el FA es por cálculos electorales, no puede ir señalando así”.

Según el ministro, lo que pedía el gobierno de Orsi “es una deuda importante”, porque se llegó “a una situación en que la intendencia si no accede a un crédito millonario no estaría en condiciones de hacer obras; hay un tema de gestión que hay que vichar”. Planteó, entre otras cosas, revisar la cantidad de cargos de confianza que hay en la intendencia, para obtener presupuesto para obras.

Detalló que a pesar de que hubo en su momento predisposición del edil colorado a votar a favor de la herramienta, el tema fue discutido en la interna del partido a nivel departamental y nacional, y se decidió no apoyarlo. Acotó que en su opinión se hizo una “exageración del tema”: “No se acaba el mundo, le decimos que tienen nueve fideicomisos, deben 400 millones, estamos endeudados hasta 2039. Paremos con la calesita”.

“Intermediación oficiosa” y “talante negociador”

Umpiérrez, intendente rochense, dijo en el Parlamento que había que “desmitificar determinados extremos que se están manejando” en torno a los fideicomisos frustrados en las tres intendencias. Es decir, ató el resultado en Canelones a la frustrada votación en su departamento y Río Negro. El jefe departamental rechazó que hayan existido presiones del gobierno nacional, aunque dijo que la intermediación de Delgado en “todo esto comenzó de alguna manera con nuestra iniciativa”.

Al respecto, relató: “Hablamos con el senador Amir Niffouri, hablamos con el diputado Sebastián Andújar, hablamos con el diputado Alfonso Lereté [líderes de los tres sectores del PN en Canelones], y después llamamos a Delgado para solicitarle su intermediación oficiosa, a un hombre que es de talante netamente negociador y que es conocido por todos por tal cariz, para que diera la posibilidad de generar un espacio de negociación para poder fructificar los fideicomisos de Río Negro, de Rocha y también el de Canelones”.

“Siempre se estuvo dispuesto a acompañar el fideicomiso de Canelones en tanto y en cuanto se levantara el bloqueo que había ejercido el FA respecto de los fideicomisos de Río Negro y de Rocha. Lamentablemente, el intendente Orsi fracasó en sus negociaciones y no pudo torcer el rumbo a las dirigencias departamentales, más allá de sus buenos oficios y sus buenas intenciones, pero no es culpa de nosotros ese fracaso”, añadió Umpiérrez.

Por otro lado, el intendente hizo referencia al frustrado fideicomiso en Rocha y acusó al FA de haber amenazado a sus ediles con la expulsión de la fuerza política en caso de que votaran a favor de la toma de deuda. “El PN lo único que hizo fue actuar con unidad en Canelones, de la misma manera que lo hizo en Rocha, pero bajo otras circunstancias más apremiantes, el propio FA”, dijo Umpiérrez. Ante la pregunta sobre las presuntas amenazas, señaló que lo supo “por conversaciones” que tuvo “con algunos ediles que se encontraban propensos a encontrar una solución para la salida del fideicomiso”.

la diaria consultó a la edila frenteamplista de Rocha Ana Caram, quien negó “de plano” lo manifestado por Umpiérrez. “Todo el proceso que ha tenido la bancada del FA con respecto a este tema y a otros se ha tomado con muchísima seriedad y cumpliendo con determinados procesos que son los que consideramos adecuados para el tratamiento de estos temas”, expresó.